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Martes, 08 Diciembre 2015 02:04

Las Big Regidoras de PV

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Big Trouble

Por las Chicas Súper Poderosas

Qué tal amigos lectores de la sección más leída y odiada de este periódico, que va que vuela para el premio Pulitzer, les saludan las chicas más argüenderas y chismosas de Puerto Vallarta y anexas, que hoy están más felices que nunca por haber librado a la mujer más despiadada de la historia, a Patricia convertida en huracán categoría 5, que al final y gracias al todo poderoso, llegó en pañales a las costas de Jalisco y Colima, porque de haber llegado como dama de primer mundo, no lo estaríamos contando.

LAS BIG REGIDORAS

Pero entremos en materia, y es que recién llegaron pintaron su raya, cada una escogió su cubil felino y acomodó los viejos muebles que les dejó el Mochilas, sillas manchadas, escritorios mugrosos y uno que otro cuadro de recuerdos olvidado por los anteriores ediles, es como si hubieran llegado a la casa de Big Brother –pero de los pobres--, donde todas se disputan un lugar por figurar ante la opinión pública, así sea exhibiendo sus más bajos perfiles, sus debilidades y sus pecados capitales.

 

EL MUEBLE

Por ejemplo, a quien ya apodan “el mueble del Cabildo” es a Bellani Fong Patiño, pues al igual que una de las primeras expulsadas del reality show de televisa, Lilian Mussi, sólo se la pasa calentando la silla, haciendo malabares, inventando escenarios ficticios de la convivencia armoniosa entre seres humanos, animales y la vegetación exuberante que dice, ¡ho! tiene Puerto Vallarta.

Son de esas regidoras que si están, bien, y si no están, mejor, como los pedos de monja, ni huelen ni hieden.

Estas chicas habían apostado porque la Fong fuera una guerrera como su hermano Gustavo, pero lástima Margarito, resultó más sope que Luis Munguía y Doris Ponce juntos.

LA YEGUA BRUTA

Y si Bellani es un auténtico mueble, de esos que exhiben en “La Blanquita”, la que le dijo “quítate que ahí te voy” es Edelmira Orizaga, quien no sólo es un ropero, sino que es la regidora más bruta que hayamos podido conocer, sus intervenciones en las sesiones de Cabildo dan pena ajena, no dice nada, sólo balbucea –como que fue a la misma escuela que El Pitas Pelayo—y a todo mundo felicita por todo. Es más, si alguien se atreviera a echarse un eructo o algún efluvio por otras partes anatómicas, ahí estaría Edelmira, felicitando y aplaudiendo.

Esta señora debería tomar clases en el INEA, o ya de plano comprarse un manual de “la menos tonta” para no estarse exhibiendo de fea manera.

Tiene de asistente a Vicente Pahua (¡imagínese usted, con eso le decimos todo!), quien sólo tiene gracia para organizar concursos de “belleza” y para engatusar con el cuento de la fotografías a muchachitas silvestres de Ixtapa y Las Palmas. Pero con todo y este escenario adverso, Pahua le puede decir a Edelmira que no abra la boca por abrirla, que piense antes de soltar la lengua, que gesticule, que tome aire y que después intervenga en el cabildo, no importa que se corra el riesgo de que se le salga algún eructo involuntario.

LA FRIVOLA

Y ya entrando al segundo nivel de la clase de regidoras que tenemos en el Cabildo, déjenme decirle que hay una muchachita que desbancó a la ex regidora Jessica Yerena, aquella que se la pasaba viéndose el trasero en cuanto espejo o vidrio encontraba, en eso de la banalidad, la superficialidad y la frivolidad, todo en un solo paquete.

Se trata de Susana Rodríguez, la chica rubia que acaba de declarar que el ser bonita no es síntoma de pendejez (sic) (aumentado y corregido, ya saben cómo nos encanta tergiversar las cosas, pero para el caso es lo mismo, ella quiso decir que puedes ser un encanto de niña y también ser inteligente), pero como el pez por su boca muere, eso está por verse, o como dijo Santo Tomás, hasta no ver, no creer.

Pues bien, esta nenorra que ahora es toda una regidora del MC, ha despertado una y mil envidias entre sus compañeras (¡ay por favor!... no la odien por ser bonita… que de bonita no tiene ni m… ¡nada! Dijera Polo Polo).

A ella la critican no sólo por su frivolidad, sino por su vida nocturna, pues todos los días parece que anda cruda y desvelada; pero que no se preocupe la Güera, le vamos a decir a Lupita Bayardi que le dé unas clases de comportamiento y etiqueta.

Si la comparamos con algún personaje de Big Brother, ella sería la versión rubia de Rossana DJ, la sexi concursante número tres de la casa más famosa de México

LA GATA BAJO LA LLUVIA

Y la que de plano se parece en todo, hasta en la forma de hablar a Ana Mireles, la cuarta concursante del Big Brother, es Magaly Fregoso, con su voz de pito que a veces atosiga los oídos de los regidores, sobre todo a los del primer edil, que ya no aguanta tanto lloriqueo.

Es algo así como una gata bajo la lluvia –con todo respeto, pues no queremos hacer un símil con las mujeres del servicio, conocidas peyorativamente como sirvientas--, pero con una inteligencia felina que ya la quisiera la mismísima Susana Rodríguez.

Magaly está haciendo divertidas las cosas en la Gran Casona que es la Presidencia Municipal, y aunque prefiere pasársela en la UMA (donde también montó oficina), cuando llega a su cubil inmediatamente despierta chismes, susurros, comentarios y alguna que otra sonrisa y abrazo hipócrita, de esas veces que te abrazan, te hacen como que te van a besar, pero sólo mueven el hocico y truenan los labios para que sientas que de veras te quieren.

Esta mujercita, que ya superó todas las dagas que le hizo El Mochilas con la Miada (La señora Ada pa los cuates), está enfrentando una alta traición de un personaje que mantuvo por mucho tiempo, a quien le dio dinero y le quitó el hambre más de una vez, al raterillo ese de Liverpool, Rodrigo Aguilera, quien “destapó” una información insidiosa que pretende acabar con la reputación de Magaly Fregoso.

Ahora se sabe que otra vieja argüendera –en eso nos supera al mil—la diputada Luisa Munguía (mejor conocido como Luis Munguía) le filtró la información al ladronzuelo, sobre el presunto mal manejo de recursos federales por parte del regidor de Bahía, Gerardo Aguirre, y donde tanto Claudia Díaz de Sandi (una de las chicas del gobernador Roberto Sandoval) como Magaly habían cobrado ciertos porcentajes para tramitar ayuda económica a miles de personas, pero después se supo que nada era cierto.

En fin, a ver en qué termina esta historia de traiciones y deslealtades.

NO LA QUIEREN

A la que le dieron con la puerta en la nariz fue precisamente a Claudia Díaz de Sandi, pues Magaly Fregoso la llevó a Guadalajara, se la presentó a Enrique Alfaro, le dijo que era la más veloz de la pradera, que sería un excelente cuadro en el MC, pero Alfaro no la quiso, le dio las gracias, le dijo “gracias por participar” y “hasta la vista Baby”.

Después se supo que Enrique Alfaro comentó que él no se iba a pelear con el gobernador de Nayarit por esa muchachita, refiriéndose a Claudia (¡pácatelas!, que madrazo).

LA LADY FANTASMA

La que ya es famosa por sus ausencias en el Cabildo, es la otra mujer de nombre Elisa Ramírez, al grado de que ya la apodan “Lady Fantasma”, pues nunca está y casi no asiste a las sesiones, siempre inventa una dolencia con su respectivo justificante médico.

Esta sería la primera expulsada del grupo si esto fuera Big Brother.

EL GARAÑON DE LO SOTANOS

El que anda desatado y que es urgente que lo amarren para que no siga haciendo daño, es el jefe de mantenimiento del Ayuntamiento, de nombre Enrique Martínez Cruz, pues además de que utiliza el vehículo oficial del municipio para sus fiestas, le ha dado por enamorar a cuanta secretaria se encuentra.

Así le pasó a Liz, una de las secretarias afines al líder de empleados municipales y regidor en sus ratos libres, Gilberto Lorenzo, y que trabaja precisamente en las oficinas del sindicato, allá donde asustan, en el viejo ex hospital Regional, ya que el tal Enrique se la llevó de pachanga, se la hizo “novia” y es hora de que no se lo quita de encima. Hay que mandarle a Centeno para que lo ponga en paz.

¿O en serio se cree el Brat Pitt de Palacio?

LOS INFILTRADOS

En la más reciente visita del presidente Enrique Peña Nieto a Puerto Vallarta, hubo dos personas que se infiltraron entre los reporteros y lograron pasar el cerco de seguridad y entrar al centro de convenciones, donde se realizaba el foro de comercio exterior, todo gracias a que una ex regidora, Susana Carreño, chamaqueó a Claudio, el encargado de las acreditaciones del gobierno del Estado, a quien llamó para que les diera sus respectivos gafetes a dos “reporteros” –que no son periodistas—y que se conocen como “los alternativos”.

Ellos, un tal Fernando y una tal Araceli, ya estaban en una mesa elegante sentados a unos pocos metros de Peña Nieto y con una actitud de, “miren, somos más chingones que ustedes”, miraban a los verdaderos reporteros. A Claudio le avisaron y los iban a sacar con el Estado Mayor Presidencial, pero para evitar escándalos, prefirieron dejar las cosas como estaban.

Como dijimos, la irresponsable fue Susana Carreño, porque sin ser ya regidora, le habló a Claudio como tal y exigió gafetes a dos seudo reporteros. Uno de ellos, meses atrás participó en un mitin en donde portaba una pancarta con mensajes ofensivos a Peña Nieto; imaginen si lo hayan sabido los del Estado Mayor.

Pero bueno, los dejamos con una foto más agradable y les prometemos que analizaremos de cerca a los regidores hombres, hasta la próxima.

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