El hoy occiso es de complexión regular, tez morena clara y de aproximadamente 1.65 a 1.70 metros de altura. Al momento del hallazgo, esta persona se encontraba con un pantalón de mezclilla a la altura de los tobillos y con una cartulina blanca que decía: “Por violador y roba carros, por la mujer que mataron embarazada por robarle su carro en Buganvilias”, misma que fue adherida al cuerpo con una navaja clavada en el abdomen.
El cadáver también tenía huellas de violencia física, ya que se le apreciaban hematomas en espalda baja, marcas de que fue amarrado y del lado de la ceja parte derecha una apertura al parecer por golpe.