Un juez de control y oralidad encontró culpables a estos tres malandrines que habían privado de su libertad a un hombre y a una mujer y a los que tenían cautivos, hasta que entre ellos se pelearon y los vecinos reportaron una riña al interior de una casa de la mencionada calle.
Al llegar los policías municipales, los delincuentes trataron de huir, pero fueron atrapados por los municipales. Desde entonces estaban en prisión preventiva y fue hasta ayer que se les dictó sentencia, por lo que pasarán en la sombra un buen tiempo.