Por Jorge Olmos Contreras La ausencia de oficio político y la incapacidad para reconocer lo que está mal (y corregirlo) y entablar un diálogo duradero y funcional con sus regidores, además de amenazas directas y un bloqueo permanente que se prolongó por meses, provocó lo que ya todos anticipaban: la renuncia de los ediles Susana Carreño y Humberto Gómez Arévalo al Partido del Movimiento Ciudadano para declararse independientes al interior del pleno del Ayuntamiento y sumarse al bloque opositor de los partidos Revolucionario Institucional, Verde Ecologista, Acción Nacional y de la Revolución Democrática.

Por Gerardo Sandoval Ortiz En las últimas semanas, el dirigente local del Partido Revolucionario Institucional, Gustavo González Villaseñor anunció con bombos y platillos el retorno de Miguel Ángel “Tito” Yerena Ruiz. También festinan el regreso al redil de Heriberto Sánchez Ruiz. Hubo otra noticia más, la puesta de la camiseta tricolor del ex rector del Centro Universitario de la Costa de la U de G, Javier Juárez Alvarado. Y cuando le cuestionan sobre fugas de talentos y en concreto del médico Francisco Sánchez Peña, el también diputado local repite la misma frase: “Paco es priista”.