Un Hule muy antiguo plantado en la equina de la plaza por la calle Zaragoza dio sombra gratificante por muchos años y sirvió de refugio de palomas y pericos, igual sentarse en la jardinera o buscar el servicio del bolero más antiguo de la plaza, el hermano silvestre, fue una actividad cotidiana hasta hace unas semanas que por el guano de las palomas, las ramas del hule se pudrieron y Servicios municipales tuvo que cercenarlo casi al ras, dejando sin sombra una gran área de la plaza principal y sin que hasta el momento, sepamos qué planes tiene ecología o servicios municipales para reponer esta sombra tan necesaria en este espacio de esparcimiento para los adultos mayores y familias. (Julia Baumgarten)