El presunto feminicida es Lucio Galeana de 30 años, concubino de María de los Ángeles que al momento de fallecer tenía 23 años; el sujeto fue detenido en el lugar de los hechos, pues su versión no concordaba con lo que los peritos forenses encontraron en la escena del crimen, es decir, en la vivienda donde la pareja residía junto con sus tres presuntos hijos.
El presunto homicida afirmó en un principio que María de los Ángeles se había caído de las escaleras, pero el personal de ciencias forenses descubrió que la mujer tenía varios golpes en su economía corporal y que varios de ellos los había recibido en la cabeza con un objeto contundente.
Después se supo que el supuesto esposo de María de los Ángeles la habría asesinado a golpes con un palo, y al ver que ya no respondía, la bañó con cuidado y la colocó en un colchón para después llamar al 911, diciendo que su mujer había tenido un accidente al caer de las escaleras de su casa.
Pero Lucio cayó en contradicciones al afirmar que antes de que su esposa cayera por las escaleras, ellos habían tenido una discusión, por lo que fue detenido en el lugar de los hechos.
De acuerdo con lo informado por los paramédicos, la joven mujer presentaba heridas en el cráneo y contusiones en el hombro izquierdo, además de que tenía una rigidez cadavérica de alrededor de tres horas.
Una vez que llegaron los agentes de la Fiscalía, observaron que la mujer estaba bañada y el lugar se encontraba limpio, por lo que se activó el protocolo de feminicidio y se presentaron al lugar peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
En la casa del homicidio estaban tres menores, por lo que se solicitó la intervención del DIF para hacerse cargo y resguardarlos. Los hijos que María deja en la orfandad son una niña de 10 meses, un niño de cuatro años y otro de siete años.