Los hechos ocurrieron durante la tarde del sábado en la segunda planta de la finca marcada con el número 164 de la calle Exiquio Corona, entre Lázaro Cárdenas y 20 de Noviembre, donde “Hugo” ya traía alucinaciones de tanta droga y al querer bajar las escaleras perdió el equilibrio y cayó en graciosa rodada.
Al llegar los paramédicos lo encontraron sobre la banqueta de la casa con una herida en la frente y nuca y comenzó a desangrarse, pero fue atendido rápidamente.
A los minutos llegaron dos jóvenes que, de inmediato le pusieron “dedo” a “Hugo”, pues dijeron que era su familiar y que tenía varios días drogándose, sin comer, hasta que las sustancias prohibidas le pasaron la factura; ahora convalece en el hospital.