Vecinos la enteraron de que en Puerto Vallarta había una agrupación filantrópica llamada La Gallada, por lo que por todos los medios buscó contactarla y solicitarle le apoyaran con una andadera para mejorar su calidad de vida y con ella poder desplazarse de un lugar a otro dentro y fuera de su domicilio.
Así, tras recibir la petición y llevar a cabo un estudio socioeconómico de la solicitante, La Gallada accedió a la solicitud y llevó a cabo la entrega del aparato requerido por doña Juana Bazán Vidrio, quien en lo recibió en manos del propio líder de La Gallada, el ingeniero Cheo Aréchiga Castillo.
“Para nosotros los jóvenes es muy motivante ver en el rostro ese gesto de agradecimiento por parte de las personas que reciben la ayuda de nuestra agrupación “La Gallada”, en lo personal me agrada estar presente en cada una de las entregas que llevamos a cabo, la verdad se siente algo muy padre en el corazón, pues sabemos que mañana podemos ser nosotros los que podemos requerir de una ayuda, así que es una forma de ir sembrando para poder cosechar en un futuro”, así lo expresó Miguel González.