Sin embargo, como la fémina se creyó Lady Motocicleta y presentaba cierto grado de ebriedad, se negó a recibir atención médica, y mucho menos ser trasladada a un hospital, por lo que se quedó en el sitio del accidente con todo y que tenía fuertes golpes y raspones en diferentes partes de su economía corporal, además de una posible fractura en el pie derecho.
La señorita estaba tan jarras, que estaba esperando a que los oficiales de tránsito concluyeran su reporte para acudir por sus propios medios a un hospital privado a recibir atención médica.