Informes policiacos, indican que el ladrón se subió en Bucerías y que al llegar a plaza Canalán en la delegación de Las Juntas, sacó de entre sus ropas el arma de fuego y amenazó primero al chofer a quien le pidió el dinero que traía, y como le estaban dando monedas de lo que había recolectado el operador de la combi y que sólo sumaron unos mil pesos, se volteó y amagó a los pasajeros, a quienes les quitó otros 100 pesos, pues entre tres o cuatro personas hicieron una “vaquita” (colecta) para que no les fuera a disparar el presunto ratero.
Ya con los mil 100 pesos en sus bolsillos, el sujeto de marras, al que describen como güero, chaparro y delgado, pidió que lo llevaran a otro lado, pero el chofer de la combi no se amedrentó y le dijo que no iba a ir a ningún lado, que si quería, que jalara del gatillo, lo que enfureció al asaltante, quien sin pensarlo, accionó la pistola 380 y le pegó dos tiros al operador y, como todos los cobardes, emprendió la huida hacía al norte, es decir, para Bahía de Banderas.
La combi hizo parada justo a las afueras del banco Santander, y ahí fue donde el pistolero lesionó al chofer. A los pocos minutos –esto es después de las 20:00 horas—arribaron bomberos de Protección Civil para trasladar a la clínica 42 del IMSS al operador del pequeño transporte.
Del sujeto no se sabe nada, pero la policía lo busca con las características que le dieron los afectados.