Fue en la base de la policía municipal donde se recibió un reporte que indicaban que por la calle Azalia, de la colonia Magisterio, muy cerca del antiguo basurero, se encontraba una persona tirada e inconsciente, por lo que al lugar se dirigió la patrulla PV-301, cuyos oficiales verificaron que era cierto, por lo que pidieron la presencia de una ambulancia.
Los socoriistas sólo lo trasladaron al nosocomio público antes mencionado, ya que no le apreciaron la herida de bala, sólo pensaron que estaba golpeado, pero una vez en el hospital, los médicos observaron que tenía una fisura en la cabeza del lado parietal, donde tenía alojada una bala, al parecer de .9 milímetros.
Al ser informados, los municipales regresaron como a las 7:00 de la mañana para tomar datos del hecho y llamaron asimismo a policías investigadores de la Fiscalía Regional para que iniciaran las primeras pesquisas de cómo fue que este muchacho recibió el balazo, y quién o quiénes fueron los causantes.
Lo anterior, porque todo parece indicar que lo hirieron en otro lugar y lo tiraron durante el amanecer en esa oscura calle.
El joven se reportó en estado grave, y casi no podía hablar por la herida en la tráquea, por lo que no se sabe si es de Puerto Vallarta o es de otra ciudad, pueblo o municipio.