El inmueble fue quemado en el verano pasado para desalojar a los paracaidistas que se habían apoderado del edificio por años abandonado, luego de un litigio entre la banca comercial y el empresario Arturo Altamirano Shehab.
Tiempo después y curiosamente luego de ser liberado el famoso narcotraficante Rafael Caro quintero se vio movimiento en el edificio que fue pintado y arreglado y organizado un hábitat.
Al tratar de comercializar la idea, los posibles compradores opinaron que los cuartos eran muy chicos y obsoletos, por lo que sus dueños decidieron tumbarlo y construir un verdadero negocio contemporáneo, Plaza comercial con Casino.
Con este proyecto, serán cinco los grandes casinos que operan en Puerto Vallarta, sin contar los muchos minis casinos que tiene la ciudad…