De entrada, la iniciativa fue desechada por el pleno, sin embargo, el empresario Fernando Beltrán y Puga Navarro, le envió un cuestionario al diputado Munguía para que, de acuerdo con el artículo octavo constitucional que habla del derecho de petición, respondiera todas y cada una de las preguntas formuladas sobre este tema.
El resultado fue la ignorancia total del diputado sobre el tema Mismaloya, por lo que el empresario le dio una tremenda y vergonzosa exhibida a este legislador del Movimiento Ciudadano que sin el menor recato presenta iniciativas de asuntos que desconoce, como el que nos ocupa.
De esta manera, Luis Ernesto Munguía González, en su desesperación por querer ser candidato a la presidencia municipal de Puerto Vallarta, quiso ser el héroe de Boca de Tomatlán y Mismaloya, y terminó en el fango de la mentira, exhibido y vapuleado por todos lados.
MIEDO Y EVASIVAS
Miedoso y acomodaticio, Luis Munguía no contestó dicho cuestionario, sino que se lo turnó a la encargada de contestar los oficios que ingresan por la Unidad de Transparencia al Congreso, Leticia Ávila, quien mucho menos conoce del asunto Mismaloya.
Luis Munguía no tomó en serio un foco rojo que podría ser de los más importantes del Estado y del país, y sólo utilizó la plataforma del pleno del Poder Legislativo para exponer una serie de incongruencias y mentiras en su iniciativa de exhorto para expropiar las tierras de Mismaloya.
Por ello, el empresario Fernando Beltrán Puga y Navarro exhibe doblemente la ignorancia de Luis Munguía, lo pone en contexto histórico del caso Mismaloya y además, le reclama el que intente atribuirse facultades legales que no le corresponden.
En una carta a la que este medio tuvo acceso, se pueden leer los siguientes puntos que Fernando Beltrán escribió al legislador del Movimiento Ciudadano:
LOS PUNTOS
“1.- Por más artículos leyes y reglamentos que usted señale, no se justifica proponer tan importante iniciativa, que ahora usted afirma categóricamente desconoce y se sustentó en chismes.
2.- Sin embargo, exhortar al Presidente de la Republica y al Secretario de SEDATU expropiar en favor de detentadores ilegales, que han querido durante 47 años aplicar su propia ley, por lo que usted se encuentra confundido al no entender ni cuáles son las tierras disputadas, ni cuál es ese juicio de restitución con el Ejido de Boca de Tomatlán, que reclamó 405 hectáreas con Planos de Dotación falsos, pretendiendo apoderarse de una tercera parte del litoral del Océano Pacifico de la Ciudad de Puerto Vallarta; y ahora, después de fracasar en sus intentos, el Tribunal Unitario Agrario les localizó y entregó su Zona Urbana Ejidal; resolviendo la demanda que interpusieron contra el Presidente de la República y Secretario de la Reforma Agraria, bajo expediente 306/96, con el mismo Plano de Dotación falso, que no tomara en cuenta el Tribunal Unitario, donde voluntariamente ingresaron al PROCEDE, y regularizaron a su manera su Zona Urbana Ejidal.
3.- Propuso solicitar la intervención del Gobierno del Estado de Jalisco, cuando ellos mismos ya se han manifestado en varias administraciones contra las invasiones que se realizaron en las excedencias no afectadas de la Hacienda de Quimixto y la Hacienda de Unión en Cuale”.
LAS MENTIRAS DE LUIS
En su oficio de respuesta, Luis Munguía le informa a Fernando Beltrán que su propuesta fue “en estricto apego a la facultad que me otorga el artículo 27 fracción XIII de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del estado de Jalisco, de realizar gestiones sociales y ser promotores de actividades que beneficien a los habitantes del estado, manifesté mi pronunciamiento sobre un asunto social y económico que está afectando directamente a la comunidad de Mismaloya, la cual forma parte del Distrito 5 que represento, con el único propósito de salvaguardar (sic) el interés superior de la comunidad y evitar un conflicto social de grandes proporciones que pueda derivar en una lamentable tragedia”,
Al respecto, Beltrán y Puga Navarro vuelve a poner en su lugar a Luis Munguía con los siguientes puntos:
“1.- El Artículo 27 Fracción XIII, en ningún momento lo faculta, en sustituirse como autoridad judicial y realizar gestiones sociales y ser promotor de actividades delincuenciales que perjudiquen a otros ante el bloqueo y lleven a cabo las sentencias firmes y definitivas que tienen el carácter de “cosa juzgada”, impidiendo que se restablezca el Estado de Derecho en una Tercera Parte de la Ciudad de Puerto Vallarta, afectando a propietarios e inversionistas de 405 hectáreas dentro de la Zona Turística Sur.
2.- Sin tomar en cuenta por su oportunismo desconocimiento e interés personales, porque el problema económico de los detentadores ilegales de la Copropiedad no existe; pues explotan la propiedad de mi representada obteniendo diariamente más de 300 mil pesos diarios, donde el Ayuntamiento les expide licencias de funcionamiento mediante Actas Circunstanciadas, al no poder cumplir con lo que les señalan los reglamentos en la materia, o les permite trabajar sin ellos; y que de ser 11 familias que nos vendieron sus derechos reales de posesión en 1970, posteriormente a partir de 1998, fueron reubicados de su Zona Urbana Ejidal a la propiedad de mi representada, para vender comercialmente los solares de su Zona Urbana Autorizada por el mismo Tribunal Unitario Agrario del Distrito Trece; independientemente de que son propietarios de 1,160 hectáreas de su Dotación, con 5,700 metros lineales de litoral, 913 hectáreas de su ampliación y 800,000.00 metros que compraron en Mismaloya y vendieron; 70,000.00 Metros cuadrados y La Puntilla Sur de la Bahía de Mismaloya.
LA ZONA URBANA EJIDAL
3.- En cuanto al problema social, que sin conocer pretende la comunidad de Mismaloya, que fue propietaria de 800,000.00 metros cuadrados que compró y vendió con escrituras; más 70,000.00 metros cuadrados que compró y urbanizó y repartió lotes con escrituras a 140 ejidatarios de Boca de Tomatlán, que está afectando a la comunidad de propietarios e inversionistas de las Ex haciendas de Unión en Cuale y Quimixto, sin ninguna justificación legal.
4.- En cuanto al problema económico que señala como comunidad, que no tiene nada en común, pues son gentes que vienen de distintos lugares a asentarse irregularmente con el auxilio ayuda y protección de las autoridades Municipales a partir del año de 1998; y económicamente han podido hacer frente a juicios improcedentes tramitados ininterrumpidamente durante 47 años, sin obtener un solo metro legal de tierra.
5.- Detentadores ilegales que, después de ser sentenciados y condenados a entregar la propiedad que ilegalmente detentan; no obstante, algunos de ellos han sido demandados condenados, aprendidos y purgado condenas por más de dos años, como el Comisariado Ejidal, por realizar asambleas para desconocer ejidatarios y sustituirlos por incondicionales.
6.- Al mismo tiempo en que demandaban al Presidente de los Estados Unidos Mexicanos y al Secretario de la Reforma Agraria para que les localizara dentro de su Dotación de 1,160 hectáreas, su Zona Urbana Ejidal, ellos por su cuenta ya la habían localizado y aprobado en 1970 y entregado los 482 solares a Ejidatarios, Familiares y Avecindados; los mismos, para posteriormente despojárselos, y venderlos a terceros, Nacionales y Extranjeros, sustituyendo a algunos de ellos con la Fracción Rustica, pequeña propiedad de mi representada conocida como la Copropiedad de 10 Hectáreas en Mismaloya”.
EL DIPUTADO EN SU TINTA
Con semejante exhibida, a Luis Munguía no le quedó de otra que eludir el cuestionario que le mandaron con una graciosa huida como respuesta: “Dicho oficio consta de un cuestionario mediante el cual se me hacen una serie de preguntas y señalamientos que hacen alusión directa a la iniciativa en mención, pero que no constituyen la información expuesta por el suscrito en el cuerpo de la misma” (sic y recontra sic).
Así de sinvergüenza Luis Munguía, al afirmar que la información que le piden responder en el cuestionario no es la misma que la de su iniciativa.
Por ello, Fernando Beltrán señala que el diputado “se conduce con falsedad, al afirmar que no constituyen la información expuesta por el suscrito, ya que su discurso se reprodujo textualmente palabra a palabra, de donde se desprendieron las preguntas”.
Y aquí viene lo mejor, pues Luis Munguía de plano se doblega ante sus mentiras al reconocer que no posee información (sobre el tema Mismaloya) y que no tiene la capacidad legal ni jurídica de poseer, y que mucho menos es autoridad competente en el asunto.
LA RECULADA DE MUNGUÍA
Veamos:
“Es por ello que como respuesta a la petición recibida de este medio, y en congruencia con la misma, utilizo este mismo conducto para comunicarle que la información solicitada no es información generada por el suscrito, ni la poseo, ni tengo la capacidad legal ni jurídica de poseer, ya que el interrogatorio en mención, se refiere en general a cuestionamientos sobre cronología de acontecimientos y antecedentes relacionados con el litigio, así como de cuestiones técnicas e históricas, los cuales por su naturaleza no tengo obligación jurídica de conocer, por lo tanto no soy la autoridad competente para responder la solicitud hecha por el peticionario. Mi esfera de competencia sobre la cual tengo inherencia (sic) para conocer y responder es en cuanto a mi trabajo legislativo y no sobre cuestiones que tienen que ver con circunstancias de modo, tiempo y lugar o sobre hechos específicos acontecidos en la época mencionada en el cuestionario, y mucho menos sobre anécdotas y experiencias personales vividas por los actores que dieron origen al litigio, materia de la iniciativa en cuestión”.
LA PALIZA
Ante esto, Beltrán Navarro y Puga le responde a Munguía:
“Naturalmente que la información solicitada no es información generada por él, sin embargo, sí la debe poseer y debe tener la capacidad legal y jurídica para poseer, y por lo menos entender sobre cronología de acontecimientos y antecedentes relacionados con el litigio; así como de cuestiones técnicas e históricas, las cuales por su naturaleza señala, no tiene obligación jurídica de conocer.
No obstante, en su comparecencia usted afirmó, por lo que tiene la obligación de probar o por lo menos señalar, ya que textualmente usted afirmó: “En el análisis del expediente identificamos que está plagado de irregularidades incluyendo la falsificación de planos y documentos”.
Usted reconoce que analizó el expediente y de ese análisis que usted hizo, y que tiene capacidad de analizar, ya que identificó que está plagado de irregularidades, incluyendo la falsificación de planos y documentos, sin señalar quién los utilizó pretendiendo obtener ventaja.
Usted afirmó: “Que se oiga fuerte y claro desde esta tribuna y para todo Jalisco, Mismaloya es de su gente, de quienes trabajan día a día, de quienes preservan su riqueza natural de quienes ahí nacieron y de quienes están dispuestos a luchar sin cansancio por defender su tierra, su origen y su historia” …
(Son) “Expresiones fuertes y claras desde el Congreso expresadas por un servidor público de elección popular que tendenciosamente expone ante la Nación un discurso que reconoce, que no conoce, ni sus orígenes y que ahora reconoce que no tiene la capacidad legal ni jurídica y menos manifestarse contra los más de 250 Jueces y Magistrados que han resuelto el uso y abuso de la justicia, dictando sentencias conforme a derecho, tomando en cuenta los Derechos Humanos.
UN LEGISLADOR ÍGNARO
Fotografiándose frente a fuertes inversiones de edificios y condominios realizadas por sus propietarios, quienes han comprado la tierra y contribuyendo con sus pagos de impuestos con el desarrollo de Puerto Vallarta, y no quienes dicen preservan la riqueza natural para defender una tierra distinta a la que les entregaron y que se mantiene virgen porque nunca la han trabajado; y dentro de una negra historia plagada de líderes y estafadores que se arriman a despojarlos de sus más de 25,000,000.00 millones de metros cuadrados que no están en Mismaloya… cuando ellos mismos son la causa de su mal causado”.
Ahora bien, continúa en su carta Fernando Beltrán Puga y Navarro… “Reconoce que las cuestiones técnicas históricas para sustentar su comparecencia ante los diputados, por su naturaleza, no tiene obligación jurídica de conocer, agravándose su exposición al reconocer que no es autoridad competente para responder el cuestionario por ser únicamente legislador, al que no le importan circunstancias de modo, tiempo y lugar sobre hechos que reconoce, son específicos, acontecidos cuando se refiere… porque según parecía que le constaba desde que nacieron los detentadores ilegales (invasores) y menos saber de anécdotas y experiencias de los actores que dieron origen a varios litigios que tienen la excepción de Cosa Juzgada, materia de la iniciativa expuesta por el Diputado al Congreso para enviarla al Presidente de la Republica, mediante engaños”.
Y para justificar su error e ignorancia, Luis Munguía remata con un “Probablemente y sin fundamentos para asegurarlo (sic), dada la naturaleza de la información solicitada, la misma podría formar parte del expediente judicial respectivo, siendo el Tribunal Agrario la instancia competente y responsable de su uso, manejo y resguardo”.
Con este párrafo, Luis Munguía se desentendió por completo de su iniciativa para expropiar las tierras de Mismaloya y al recular, quiso pasarle la bolita al Tribunal Agrario.
Por ello, Puga y Navarro le vuelve a responder: “No es probable, sino totalmente cierto, el que la información solicitada forma parte de los expedientes de los juicios dictados, donde el Tribunal Unitario Agrario resolvió la demanda interpuesta por el Comisariado Ejidal de Boca de Tomatlán, en sustitución del Presidente de la Republica y del Secretario de la Reforma Agraria, a quienes demandaron la localización y aprobación de su Zona Urbana Ejidal, mientras ellos mismos la localizaron y lotificaron hace 49 años, desde el 1 de noviembre de 1970, y entregaron 482 solares a ejidatarios, familiares y avecindados; y para obtener recursos para ampliar su Litoral hasta la Playa de las Gemelas, y apoderarse de una Tercera Parte de la Ciudad de Puerto Vallarta, insertaron un nuevo plano aprobado de Dotación y reubicaron a los adjudicados, a los que les quitaron sus solares dentro de la pequeña propiedad de Mismaloya que se les reclama, y ahora se niegan a devolverlos; ya que sus solares los venden a Nacionales y Extranjeros, con auxilio del Ayuntamiento de Puerto Vallarta, que los deja construir sin licencias, y otorga permisos de funcionamiento o les permite funcionar sin licencias, como se tiene perfectamente acreditado”.
UNA TRAS OTRA
Pero Luis Munguía iba por más paliza al escribir:
“Asimismo, en aras de proporcionar una respuesta clara y satisfactoria, le informo que para fundamentar la iniciativa, y como representante de la voz del pueblo que me eligió con su voto, utilicé como fuentes de información los testimonios de algunos habitantes de Mismaloya, que se acercaron a mi a solicitar mi apoyo e intervención en el asunto, y que se vieron directamente afectados con la resolución tomada por el Tribunal Unitario Agrario del Distrito Trece de la ciudad de Guadalajara, así como de información publicada en distintos medios de comunicación y redes sociales de dominio público”.
No tuvo que esperar la contestación, pues el empresario Beltrán Puga y Navarro, le puntualizó lo siguiente:
“La única forma de proporcionar una respuesta clara y satisfactoria a su propuesta de acuerdo legislativo, no puede fundamentarla en fuentes de información y testimonios de algunos habitantes de Mismaloya que se acercaron a usted a solicitar su apoyo e intervención (chismes), cuando usted mismo reconoce que no tiene la capacidad jurídica de los Tribunales para resolver; como tampoco poder contestar un simple cuestionario, lo que no solo resulta contradictorio sino hechos y actos de mala fe excediéndose en sus funciones como Servidor Público”.
No obstante, a todo lo anterior, Luis Munguía todavía le informó a Beltrán Puga y Navarro que su iniciativa fue desechada en sesión del pleno el 12 de junio, por lo que el empresario le recuerda al diputado que “no resulta suficiente que la iniciativa por usted propuesta hubiese sido desechada, sino que el que afirma debe de probar lo afirmado”.
SOLICITAN UN CAREO
En este sentido, Fernando Beltrán Puga y Navarro se comunicó con el coordinador del grupo parlamentario del MC en el Congreso, Salvador Caro Cabrera, para solicitar un careo con Luis Munguía “para cuando su tiempo lo permita, y se lleve a cabo dicha reunión el día y la hora que así lo disponga”.
Por último, pidió se cite a comparecer a Luis Ernesto Munguía Gonzales, para que exponga los motivos reales que tuvo para solicitar la expropiación de 405 hectáreas, que fue lo que lo motivó a solicitar al Pleno de esa Cámara de Diputados esa iniciativa, y a explicar los motivos por los que se niega a contestar el cuestionario que textualmente se desprende de su comparecencia, “ya que resulta ser totalmente incierto el que los condenados a desocupar la propiedad de 10 hectáreas de mi representada, durante 47 años han contado con los recursos suficientes para pagar y demandar en no menos de 200 ocasiones la restitución de 405 hectáreas, de otra Hacienda no afectada, incluyendo a Mismaloya, sin conocimiento de los que pudieran ser afectados por esas demandas de garantías y Agrarias”.
Hasta el momento, Luis Munguía no ha respondido si va a asistir al careo con Fernando Beltrán, ni tampoco ha informado si ya lo citaron a comparecer sobre su iniciativa desechada.
Por hoy se nos terminó el espacio, pero en otro artículo publicaremos íntegro el cuestionario que Fernando Beltrán envió a Luis Munguía y que éste se negó a responder.