Tres años después, González Palomera se mantiene en el PRI. Su partido lo hizo a un lado por segunda ves y ahora, en su tercera oportunidad anda en la misma búsqueda. Abundan priistas que creen a ciegas que Andrés otra vez no conseguirá su propósito. Pero ahora las condiciones cambiaron. Los encontronazos entre su partido y el gobierno estatal con el Movimiento Ciudadano, y aquí, su choque personal con el alcalde, le cierran una puerta que se le habían mantenido abierta.
De aquel pacto de 2011, Andrés González fue el único que no cumplió su compromiso. En el Partido Acción Nacional, Ramón Guerrero Martínez se quejaría de que dentro de sus elecciones interna le hicieron tablas su candidatura y renunció para sumarse al MC. Ahora es el presidente municipal de Puerto Vallarta. Andrés se conformó en cobrar su cheque quincenal en la oficina del gobierno del estado. Por su lado, Tito Yerena no pudo asimilar en el 2012 la segunda negativa de su partido a ser el abanderado y cumplió a cabalidad el “juramento de tres”. Renunció al PRI y aceptó ser el candidato del Partido de la Revolución Democrática. Se debe decir, el abogado y sobrino del jerarca de la CTM Rafael Yerena Zambrano, ya está de regreso en el tricolor.
Entonces, a tres años de distancia, aquellos dos que se juraron amor político, Andrés y “el mochilas”, ya se ven y se dicen las cosas cual enemigos en un duelo llanero. Seguro que uno piensa del otro, no haberse arrepentido de mantener el romance político. Humberto Gómez Arévalo, “El Beto del Infonavit”, debe tener bien asesorado a su amigo “Andy” y de lo menos le confió cómo “el mochilas” lo trata a él.
El partido de Ramón Guerrero, el MC, no tenía errada la puerta a González Palomera en el entendido éste puede ser buen elemento a reclutar. Como al alcalde, consideran al representante del gobernador como un prospecto con fieles seguidores, dispuestos a seguir a Andrés a una eventual aventura por el MC. En el MC hay muchos que piensan que el PRI le volverá a dar el portazo en su cara a Andrés y este les había prometido que en ese escenario, ya se animaría a decirle adiós a su partido y aceptar la invitación naranja.
El origen de lo encontronazos ni siquiera está en Puerto Vallarta. El MC decidió romper toda relación institucional con el gobierno estatal priista a raíz de la revelación de un enmarañada estrategia implementada por funcionarios estatales para descarrillar la figura de Enrique Alfaro Ramírez y bloquearle su camino a la alcaldía de Guadalajara. Alfaro no solo es la figura preponderante del MC sino el político con mas posibilidades de derrotar a PRI en las elecciones a celebrarse dentro de once meses. El portal Reporte Índigo pudo hacerse de un documento cuyo contenido traza supuestas estrategias para desestabilizar, primero el gobierno emecista de Ismael del Toro Castro en Tlajomulco para echar por tierra la historia de ser ese municipio un modelo de ciudad en bonanza cuyo arquitecto es Alfaro.
Si se observa con visión política, nada d erar tendría que los adversarios elaboren tácticas para neutralizar al adversario. Pero los del MC asumen que desde el gobierno del estado se trabaja en una campaña sucia en municipios gobernador por el MC. En ese cuarto de guerra participan el titular de la Secretaría de Finanzas Administración Ricardo Villanueva y su segundo de abordo, el ex alcalde vallartense, Salvador González Resendiz; el secretario técnico del gabinete aristotelista, Alberto Pérez Obeso y los asesores, Alfredo Rico, Juan Luis Humberto González, Iván Manuel Silva, Martín Maqueo y su jefe Enrique Dau Flores; otros de la mesa de estrategias citados en el documento son: Enrique Dau Flores, además del secretario particular de Sandoval Díaz, Gilberto Sánchez Pantoja, el jefe de Comunicación Social, Gonzalo Sánchez, el director general de proyectos, Juan Carlos Magallanes y el titular del programa de la televisión estatal, el viejo periodista, Gilberto Pérez Castillo. Rogelio Campos, ligado a los medios de la UdeG y José Alonso Torres Vázquez, también periodistas, forman parte de este bloque antialfarista.
De los primeros en reaccionar ante las estrategias sucias diseñadas y aplicadas desde el gobierno estatal, fueron los naranjas de Puerto Vallarta. Estaban obligados porque los estrategas priistas pusieron a Ramón Guerrero como un alcalde del MC con posibilidades de usarlo para neutralizar a Alfaro. El término clave es “desestabilizar” al alfarismo y un instrumento a manipular era el alcalde de origen panista. No se sabe que Ramón Guerrero se condujo en algún momento cual títere de los priistas. Apenas leyó el compendio sucio y se puso a la defensiva. Redactó un documento para su difusión y acusó al representante del gobierno estatal, Andrés González, como un desestabilizar por bloquear programas impulsados por el gobierno municipal.
Guerrero Martínez sabe Andrés realiza una encubierta campaña política para cumplir su sueño de ser candidato del PRI. Dos días después de abrir fuego, en la inauguración del cemento de la avenida Víctor Iturbe “el pirulí”, en lo mas alejado del Coapinole, se vieron de frente y el alcalde no tuvo empacho en restregarle en su cara un “andas en campaña…” el funcionario estatal le reviró con un “andamos…”. Luego, el alcalde tachó a Andrés de ser un cínico.
Hasta ese grado llegaron dos de nuestros políticos. Todo por sus aspiraciones, todo por razones políticas. Antes se juraron lealtad y pactaron compromisos. Tres años mas tarde, se reencuentran pero pierden forma y figura al imponerse en ellos sus respectivos intereses políticos. Nada quedo, ni siquiera cenizas de cuando los dos en el mas íntimo de los privado, con Tito Yerena Ruiz como testigo, definían sus propias estrategias, quién sabe su limpias o sucias, para desterrar de Puerto Vallarta a los amos de su respectivos partidos.
Revolcadero
En el ya habitado edificio de la UMA del gobierno municipal nos reportan un significativo aumento de la efervescencia política. Los funcionarios mochilistas se mueven con vistosidad de cara al proceso electoral del próximo año. Nos reportan los propios empleados municipales que en las oficinas de Participación Ciudadana, en donde despacha el foráneo Diego Franco como titular, es en donde algunos de sus coordinadores de sector ya se sienten como futuros candidatos regidores por el partido naranja. Mencionan que entre estos acelerados burócratas municipales están el motejado como el “Cachis”, un ixtapense que no hace muchos meses regresó del país del norte y que responde al nombre de pila como Víctor Arechiga. De él nos relatan que ya se siente el sucesor de Candelaria Villanueva en la delegación de Ixtapa; claro, no como delegado sino como regidor. Sin embargo sus críticos apuestan a, que de convertirse en edil, el muchacho sería una especie en el Ayuntamiento y en la versión corregida y aumentada, del actual regidor, ahora convertido a independiente Humberto Gómez Arévalo, el famoso “Beto del Infonavit”.****** Y en la delegación de Las Juntas, otra de las soñadoras y despistadas es Marina Ramírez, una funcionaria más de Participación Ciudadana. Que en su desubicación política ha confiado a sus allegados que por ser de las consentidas del jefe Diego Franco y defender a ultranza al máximo jefe, a alcalde Ramón Guerrero, y que con el impulso que este le prometió, logrará colarse en la próxima planilla del MC.****** De los rumbos de la populosa demarcación municipal de El Pitillal, nos colocan en la lista de los acelerados apuntan a un individuo apodado como “El Rayo”. En honor a la verdad, no tenemos ni la más mínima idea quien es ese personaje pero nos juran que él presume estar en la lista de “los considerados” entre las cartas del titular de Participación Ciudadana como futuros candidatos a una regiduría. Eso animó al muchacho de quien nos dicen ya hasta se dio a la tarea de estar operando una presunta estructura junto el asesor presidencial, Santiago Centeno Ulín. Aunque puede ser mas que una estructura, sino mas bien una estrategia finamente a elaborar, “el rayo” suela la siguiente historia a sus amigos para convencerlos de ser chiqueado de Franco: solicitamos a cada uno de los coordinadores, la entrega de un listado donde contenga el mayor número de líderes posible por colonia incluido 20 promotores. Esto para la probable movilización de ciudadanos en el caso de celebrarse el plebiscito que convocará el alcalde Ramón Guerrero. Los mal pensados nos afirman que en realidad la información reunida la usa el pitillalense para su beneficio político y la envía a los altos mandos naranjas para vanagloriarse con estos. ****** Finalmente en Las Palmas, señalan que un ex cuñado del dos veces delegado municipal palmense, Juan Dueñas Cabrera, de nombre Miguel Becerra y Coordinador de la Zona Dos, es otro de los elementos de Participación Social que ya se siente regidor. Por lo menos ya lo presume a sus amigos. Preguntamos por Las Palmas y otras rancherías pero literalmente nadie lo conoce. Solo que vive en El Colorado. Algunos saben de él por su trabajo en el gobierno municipal pero no por ser buen vecino. Que el muchacho Becerra no se olvide que si el MC ofrece una regiduría a los habitantes de la zona rural, es el regidor Oscar Avalos Bernal el que lleva mano y el que deberá bendecirlos. Y hasta donde sabemos, “el canitas Bernal no ha tratado con Juanito el veterinario, el que sabe que el hombre fuerte color naranja, y también del ejido es el regidor mochilista.