En un salón de la calle 16 de Septiembre, allá por la parte alta de El Coapinole se reservó un saloncito de colonia en donde se dieron cita los activos del Movimiento de Regeneración Nacional. Cuando notaron la presencia “extraña” de una reportera, la legisladora federal ordenó sacarla del local. Un morenista preguntó por qué la acción contra la reportera y le explicaron: “la maestra Lorena tiene resquemores porque le pegaron en la prensa”.
Leímos una nota informativa sobre aquella reunión y es una declaración el evento de Jiménez Andrade. “Para dar a conocer la agenda legislativa y dar continuidad a los proyectos que lanzó el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador respecto a los apoyos para sectores vulnerables como adultos mayores y jóvenes”
Lorena Jiménez, a quien le empiezan a brotar reclamos por desentenderse de la lucha de su gremio, los maestros, lo primero que ordenó ese lunes fue prohibir el uso de aparatos digitales, de teléfonos inteligentes, no filmar, ni grabar, ni transmitir en vivo. Por lo menos a uno de los asistentes le resultó una exageración de la diputada federal que rayaba en la imposición y anteponer la oscuridad a la transparencia.
De la nota informativa de la reportera Carina Elizondo destacamos otros datos relevantes dados por la diputada morena: El primer paso a dar es crear “un enlace con la coordinación nacional hacia el estado y el Distrito 05 ya que no habrá dirigentes de dichos cargos hasta el mes de diciembre”. Este dato es de suma importancia. Pero la ausencia de esos enlaces no impedirá “ir aterrizando los proyectos”.
Esta mañana del lunes 17 ocurrió un desayuno de reporteros con los futuros regidores de la fracción morena del próximo Ayuntamiento. Se anunció la asistencia del Coordinador de Vinculación Política del partido creado por López Obrador, Luis Roberto Preciado Zavala pero éste no llegó a la cita.
Primero, lo del desayuno convocado por los regidores electos de Morena pareciera ser un acto en respuesta a la reunión de la semana pasada, cuya presencia estelar fue la diputada federal, Lorena Jiménez.
Decíamos líneas arriba, que la proclamada unidad en el discurso de los morenos se da de dientes para afuera, una unidad meramente simulada. En ninguno de los encuentros tomaron en cuenta al diputado local Bruno Blancas. A Lorena Jiménez tampoco la consideraron invitarla al desayuno con los regidores. Cuando alguien propuso invitar a la reunión del Coapinole, la respuesta fue un rotundo “no”.
Bajo la premisa de que los morenos deberían todavía festejar el triunfo de López Obrador y sumar talento, conocimiento y fuerza para sacar adelante el proyecto de AMLO, nos hallamos extrañamente con un choque de dos y hasta de tres fuerzas en la tropical Morena de Puerto Vallarta.
Lorena Jiménez acudió días atrás a la oficina de la dirigente nacional de Morena, Yeidkol Polevsky, la exdirigente empresarial la dejó alrededor de dos horas en la antesala y jamás le abrió las puertas de su despacho. Entre los morenos se divierten cuando platican ese momento. “No quiero saber nada de Jalisco” fue la explicación de la Polevsky.
A Lorena Jiménez le queda claro que no habrá elección ni designación de nuevos dirigentes y que Morena reanudará sus actividades como partido político con lo que hay. Ella quiere una dirigencia rotativa y colegial, con asiento para un representante suyo, otros de Bruno Blancas, un espacio para quien designe Laurel Carrillo y un “independiente”. Por ahí se habló de una propuesta, un profesor descrito como una persona obesa ya presentado a las bases morenas.
La unidad deberá esperar. Cerradas las puertas de su partido, la diputada mudó del partido su interés a los espacios de quienes se encargarán de aquí a diciembre a los preparativos de gobierno. La diputada entiende a la perfección que ahí está la carnita más apetitosa de la administración federal que arrancará el primero de diciembre.
Nuestros amigos morenos saben, porque así les ha sido informado, que habrá dos delegados, o dos subdelegados en el Distrito 05 y serán ellos los responsables de aquí a diciembre de todo lo relacionado a los dos programas sociales –y políticos- de la era lópezobradorista. Ya les dijeron que desde la capital del país se anunciarán los nombramientos.
Por cómo se mueven y actúan los morenos vallartenses no envían mensajes como para ser optimistas de que la nueva era todo será distinto y mejor. En el corazón moreno ya existe una lucha intestinal cuya disputan es el control de los programas sociales dirigidos a los jóvenes, estudiantes o “ninis”, y los apoyos a los adultos mayores.
En la reunión de Lorena Jiménez con los suyos –y por ahí algunos infiltrados- les fue dicho que serán cinco mil los jóvenes y adultos becados en el distrito. Los líderes de cada tribu morena se apuran a organizar a sus incondicionales a diseñar sus “propuestas” y agandallar a “los contras”.
No será diferente a los tiempos del panismo, sino más bien se proponen repetir el riguroso control del sistema priista, la propuesta morena de aplicar en los dos programas ya citados.
Los dos “súper delegados”, que invariablemente responderán al interés del partido, tomarán geográficamente las riendas de la organización. Uno despachará en los municipios de la Costa, Tomatlán, Cabo Corrientes y Mascota, y el otro se alojará en la sierra para atender a los municipios serranos. Los equipos que integren esos delegados, harán recorridos, tomarán nota de aspirantes a las “becas”, de estudiantes y adultos mayores. Para diciembre que asume López Obrador el gobierno federal, habrá trabajo avanzado.
¿Qué pretenden los morenos con esos “delegados”? es cierto, apoyan en el trabajo al futuro gobierno de don Amlo. Sin embargo, y muy al estilo de los viejos tiempos, panistas o priistas, se disponen a depurar y diseñar una nueva listado de jóvenes y adultos beneficiarios de los apoyos del gobierno federal.
Si el trabajo se realiza como se proponen los morenos no será diferente porque la intención es ya sabida, en la nueva lista de beneficiarios, la mano de los morenos ya pretende una burda manipulación.
Los chiquillos morenos, los estudiantes y los adultos, familiares, hijos, compadres, comadres, recomendados, amigos, simpatizantes, militantes, tienen mano y son los primeros derechohabientes a las becas. Esas cinco mil becas, tres mil “ninis” estudiantes y dos mil adultos mayores, es el botín político que ya adentro de Morena se disputan las tribus de Lorena Jiménez, Laurel Carrillo y Bruno Blancas.
Revolcadero
A propósito de apotyos a adultos mayores, ya muy entrada la tarde de este lunes se difundió un boletín de prensa del gobierno municipal. “El CAIAM, un rayo de esperanza para adultos mayores sin apoyo” se titula el documento. En el antetítulo indica “se han invertido más de 1.2 MDP en su rehabilitación”. Ya sabemos un nuevo dato. El CAIAM es el Centro de Atención Integral para el Adulto Mayor es el “asilo de ancianos”, administrado por el DIF y conocido por muchos por hallarse contiguo a la más popular unidad deportiva “La Lija”. Que el proyecto de remodelación consta de cinco etapas y ya se completaron tres. Las mejoras en las instalaciones del Asilo se observan en las áreas de los dormitorios, las camas, baños y la capilla. Se trata de hacerle más amena la estancia a los chamacos adultos.****** El espíritu beisbolero, sin duda será el deporte de moda en el sexenio por arrancar ya en diciembre. Es el deporte preferido de Don Amlo, lo que animó a morenos y morenas a consultar al señor Google qué diablos es el beisbol, como se juega, en dónde se juega, quiénes son los beisbolistas estrellas mexicanos y varis etcéteras. Pues bien, al mediodía de este martes 18 se ofrece una rueda de prensa en la sala de prensa del viejo edificio del gobierno municipal en el malecón. Ahí se darán algunos pormenores del encuentro de béisbol a celebrarse el martes 2 de octubre en el estadio de beisbol de la unidad deportiva Agustín Flores Contreras. El juego lo protagonizarán los equipos Charros de Jalisco y una selección de la Secretaría Marina. En el tercer año del retorno del equipo Charros de Jalisco, ahora en la Liga del Pacífico, programan su primer juego de pretemporada en Puerto Vallarta.******Vaya, fuentes ligadas a “las monitas”, las del Movimiento Ciudadano, no las del palenque, nos confirman que Diego Franco Jiménez a puro lloriqueo exigió para él la titularidad de la Dirección de Servicios Públicos Municipales. Arturo Dávalos Peña debió ceder pese a que esa dependencia estaba reservada para el ahora presidente municipal interino, Rodolfo Domínguez. Se suponía que desde la semana pasada se plancharía todo lo relacionado al gabinete de Dávalos. Pero Franco complicó todo y obligó mover a Domínguez como el propuesto para director de Desarrollo Social. Eso le cerró la puerta a Víctor Bernal. ¿Por qué la lloradera de Franco? Porque Diego Franco ya sabe que dentro del MC, Víctor Bernal tiene mayor aceptación y ambos compiten por la candidatura a la alcaldía en el 2021. Y además, porque Franco es hechura de Ramón Guerrero “el mochilas”; éste lo trajo de Guadalajara y gusta aplicar el mismo método para abrirse espacios. Pero bueno, este es un tema que merece mucho espacio.