Sobre los hechos acontecidos en Bahía de Banderas, se sabe que en los primeros minutos de este sábado 16 de octubre fueron encontrados los cuerpos de Berenice Gómez Jiménez, su esposo Leonardo Sahagún Corona y de la señora de 80 años, María Luisa Flores Rosales; los tres fueron degollados por una o más personas, según lo que han observado los médicos legistas de la vecina entidad.
Se cree que a estas personas las asesinaron durante el día, en una casa donde vivían que está frente a la comisaría de seguridad pública del mencionado poblado, justo en la plaza principal y a un lado de las oficinas del Registro Civil; pero que los hallaron por la noche, gracia a que un familiar fue a buscar a Berenice y a Leonardo, ya que todas las tardes acostumbraban a salir a platicar a las afueras del domicilio, y como ayer no lo hicieron, se les hizo bastante extraño, tanto a los vecinos como a los familiares.
También se comenta que por un acceso de la vivienda se podía ver el cuerpo de Leonardo Sahagún en medio de un charco de sangre, por lo que dieron aviso a las autoridades, cuyos oficiales pudieron ingresar a la casa solo para descubrir la dantesca escena, pues en el piso yacían degollados los concubinos, mientras que en la segunda planta encontraron a doña María Luisa en las mismas circunstancias, alguien le había cortado el cuello y murió desangrada.
Berenice y Leonado tenían viviendo alrededor de 25 años en el inmueble, lo rentaban y por desacuerdos con el arrendador, depositaban la renta en un juzgado civil, por lo que también es otra línea de investigación que siguen los policías ministeriales de Nayarit.
Sin embargo, una de las líneas de investigación más robustas es la que nos habla de un posible móvil por las tierras que poseía doña María Luisa Flores –cuya ahijada, en este caso Berenice, se la llevó a vivir con ella ya hace mucho tiempo, pese a la inconformidad de sus parientes directos--, pues era ejidataria activa en el ejido de Valle.
No hay que perder de vista que en toda la zona de Bahía de Banderas se está registrando un fenómeno relacionado con la delincuencia, en el sentido de que sujetos presionan a campesinos, ejidatarios y pequeños y grandes propietarios de terrenos, a que les vendan barato o de plano los extorsionan o los hacen firmar bajo amenazas de muerte, para que cedan sus tierras; situación que también es investigada por la fiscalía de Nayarit.