El ahora occiso respondía al nombre de Bruno Sandoval Munguía de 33 años, era originario de Puebla y se dedicaba a la venta de automóviles. De acuerdo con las primeras investigaciones, se supo que tenía poco más de un mes que había llegado a Puerto Vallarta y que rentaba una casa en la Calle Iteso número 227 de Villas Universidad.
La finca, muy vistosa por sus arreglos de aluminio, es donde residía el ahora muerto y fue hasta ahí a donde llegaron varios sicarios, tocaron a la puerta, le preguntaron si vendía una motocicleta que tenía en la cochera, y al salir, le dispararon a quemarropa para después huir con rumbo desconocido.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 11:00 de la mañana de este sábado 19 de octubre del 2013 en dicha colonia que se ubica muy cerca de la UNIVA. Hasta ese lugar llegaron varios hombres en un auto compacto color blanco, se bajaron y de forma muy astuta hicieron que Bruno saliera del domicilio con el pretexto de que querían comprarle la motocicleta, pero al salir, lo agredieron con una pistola .9 milímetros y le asestaron por lo menos siete balazos.
Los vecinos llamaron al 060 y después llegó una ambulancia para llevarse al Hospital Regional a la víctima, quien falleció poco después por las heridas de bala que tenía en su economía corporal. De los asesinos, nada se supo, ya que la policía municipal y estatal llegó tarde y no pudieron dar con su paradero.
Según datos aportados por los vecinos del lugar, desde la noche del viernes andaban merodeando la casa donde vivía el vendedor de autos dos vehículos, una camioneta negra y el coche compacto de color blanco; incluso que preguntaron que quién vivía en ese domicilio, pero como el poblano tenía muy poco de haber llegado a la ciudad, no pudieron dar más detalles de esta persona.
Sin embargo, este sábado regresó el carro blanco con los presuntos sicarios para dar muerte a Bruno Sandoval Munguía, quien tenía en su garaje una camioneta cherokee verde modelo 2000 con placas MPC 2843 del Estado de México.
Más tarde arribó al lugar personal militar y el agente del Ministerio Público del fuero común.
Por último, trascendió que al sujeto asesinado le habían quitado un maletín en color plata.