giweather joomla module
Viernes, 23 Mayo 2014 22:17

La caída de Magaly Fregoso Y el narco susto que se llevó el alcalde en Las Palmas

Escrito por
Valora este artículo
(0 votos)

Por las Chicas Súper Poderosas

El presidente municipal, Ramón Guerrero Martínez no escogió mejor fecha para cantarle las golondrinas a la presidenta del DIF, Magaly Fregoso –su otrora pareja sentimental--, a quien le dio un ultimátum el mismísimo día del amor y la amistad, es decir, el pasado 14 de febrero: “¿Te vas tú o me voy yo?”, dicen que le espetó en pleno rostro el alcalde a su finita Dulcinea.

 

Magaly entendió que El Mochilas la estaba terminando, que ya no quería nada con ella y que ya no podría ser su compañera de alcoba en los días por venir, por lo que hizo sus maletas y se fue del lugar que una vez fue el nido de una y mil batallas, donde el presidente y la primera dama se juraron amor por siempre.

Calzonuda como es, Magaly no se acongojó ni recurrió a los mimos triviales de las parejas que alguna vez terminan la relación, tampoco dejó asomar ninguna lágrima, no le daría ese gusto al Mochilas, y se fue con la frente en alto.

Pero su orgullo de mujer duró muy poco, toda vez que desde el primer círculo de sus amistades, salió la información en el sentido de que Magaly Fregoso andaba como “miada”, sí, literalmente “miada” –pero no de la forma en que los bebés y los borrachos mojan los calzones cuando no controlan los esfínteres--, no, estaba “miada” por la aparición en la escena pública de Ada, la súper secretaria que ahora es la nueva conquista de Ramón Guerrero.

EL NUEVO AMOR

Dicen que Ada le ha dado al alcalde todo lo que no le dio Magaly, que hasta llegó silbando a la pasada reunión de Cabildo, donde mostró una cara de satisfacción que no podía ocultar ni ante sus más acérrimos enemigos –¿verdad Beto Gómez, Susana Carreño y Humberto Muñoz Vargas--, el placer se le veía en el rostro, andaba como volando bajo y no era el efecto de la Primavera, no, Ramón está realmente enamorado de la muchachita, eso cuentan las lenguas de doble filo.

Para Magaly fue como un gancho al hígado enterarse que su otrora “bomboncito” (así le decía al Mochilas) se había ido con otra, con una simple secretaria, casi, casi con la chacha, por lo que ha estado inconsolable hasta nuestros días.

Nada tonta, Magaly guarda muy adentro su dolor, ya no lo externa como los primeros días en que su puso unas borracheras que terminó abrazada y amanecida, quién sabe dónde, del cuerpo del ex suboficial administrativo del Ayuntamiento, Héctor Briseño, su verdadero amor.

En realidad muchos cuestionan la relación que había entre Ramón Guerrero y Magaly Fregoso. Es una farsa, comentaban otros, una simple simulación que algún día terminará… y ¡zaz!, terminó más rápido de lo que muchas pensábamos.

EL COSTO

Sin embargo, Magaly Fregoso está dispuesta a cobrar caro el haber pasado por las manos del Mochilas, por haberla hecho suya y por gritar a los cuatro vientos que eran novios y que muy pronto se casarían. La Fregoso es una dama herida, despechada y dispuesta a vengarse y recurrir a la Ley del Talión si es posible, diente por diente y ojo por ojo.

Dicen que está dispuesta a cobrarle muy cara la afrenta al alcalde y que incluso ya puso en marcha su plan para destapar ante los medios y periodistas que quieran escucharla, todo lo que sabe intramuros del actual gobierno municipal emanado del Movimiento Ciudadano, el mismo Partido que ve la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio, pues en Guadalajara todo lo ven negro, corrupto y mal, y en Puerto Vallarta ven todo blanco, color de rosa, limpísimo, sin tintes de corrupción… ¡ah! los políticos.

Pero el presidente municipal ya supo los planes de Magaly, y antes de que empiece a soltar cajeta al ventilador y a escupir para arriba, el Mochilas la está mermando, le quita poder, le corre a sus principales colaboradores y la acorrala para que se largue de una vez por todas de la presidencia del DIF, lugar al que nunca debió haber llegado.

Y para que Magaly no sintiera lo duro, sino lo tupido, el alcalde despidió a su amor platónico (al de Magaly), Héctor Briseño, quien siempre abusó de su supuesta cercanía con El Mochilas para llevarse a la “primera dama” de fiesta y de borrachera, lo que hacía pasar al presidente como un cornudo.

LA CAIDA DE HECTOR

Por ello, cuando vino el rompimiento sentimental entre la Fregoso y el Mochilas, el primero que cayó en desgracia fue Héctor Briseño, quien con lágrimas en los ojos juró venganza –dicen que está dispuesto a subirse al proyecto político del priista Andrés González Palomera—y se fue unos días a Europa a repensar la ofensiva contra Ramón Guerrero.

No obstante, parece que Ramón le tiene miedo a Magaly, por eso no se atreve a correrla él mismo, sino que la está hartando para que la “cara de caballo” (así se expresa él en tono peyorativo de la Fregoso) se vaya por sí sola.

Magaly está al bordo del precipicio, se dobla, se dobla pero no se cae, aunque le hayan quitado hasta el manejo de nómina para dárselo a un incondicional del Mochilas que metieron contra el berrinche de Magaly, un tal Yussuary Espinosa, quien ahora es el subdirector del DIF y el que maneja todo lo operativo y administrativo del Sistema.

El que sigue en la lista de los incondicionales de Magaly porque es una gente non grata ya en las oficinas de la Presidencia Municipal, es Oscar Pérez, aquél que casi se mata de una caída cuando hacían un recorrido por el edificio de la UMA.

EL QUE SIGUE

Oscar Pérez forma parte de la cofradía de Magaly (Los Chukys les dicen) y junto con Héctor Briseño y el Dorian Grey del Pitillal, Luis Ernesto Munguía, quisieron tragarse el mar a bocanadas y terminaron ahogados en su propia ambición.

Sin Magaly con poder, los días de Héctor Briseño están contados en el Ayuntamiento, pero El Mochilas no se atreve a correrlo por alguna razón, sólo le da un trato despreciable, indigno para cualquier ser humano, pero Oscar ahí está, aferrado al hueso al igual que su jefa de grupo, Magaly Fregoso.

Si El Mochilas quiere realmente correrlo, tenemos un dato contundente en la mano: Oscar Pérez tomando atribuciones de la Subdirección de Tránsito Municipal, ha otorgado “permisos” de su puño y letra para estacionamientos privados en la vía pública, como el que autorizó sobre la calle Venustiano Carranza 393 en la colonia Emiliano Zapata, donde le “concesionaron” a una señora 15 metros lineales de calle para aparcamiento particular el pasado 14 de febrero.

Todo aquél automovilista que llega a este lugar a estacionarse, de inmediato es invitado a retirarse por la señora que presume el permiso que le dio Oscar Pérez, háganos ustedes el recabrón favor.

Pero volviendo a lo de Magaly, el boiler está por explotar –como le sucedió a Doris Ponce, alias Lady Daga—ante el secreto a voces que ya circula por la ciudad, en el sentido de que el alcalde se casa el próximo 14 de junio en Ayutla con la chiquilla de Las Palmas conocida como “Ada”, la auténtica primera dama de Puerto Vallarta.

Por cierto, esta muchachita tenía un novio en la región de Ixtapa a Las Palmas, muy conocido él por tener un apodo de un animal anfibio, por lo que era intocable… hasta que El Mochilas se la hizo novia.

Se sabe que incluso hace unos días el alcalde fue interceptado por un convoy de camionetas que conducían hombres armados –narcos pues—por la carretera a Las Palmas, que le enviaron un aviso de que el jefe no estaba nada contento porque El Mochilas anda con su ex.

Comentan que El Mochilas se puso de mil colores, pero que siguió su camino no sin antes dialogar algo con los presuntos narcotraficantes, pero esta, es otra historia. (Esto es un avance de lo que se publicará en la próxima edición del periódico VALLARTA UNO)

Visto 3445 veces
Inicia sesión para enviar comentarios

Vínculos importantes

Publicidad

Para anuncios en la versión impresa y en línea comunicarse a la Redacción al teléfono 322 294 8412