Sobre estos hechos que originaron una intensa persecución por varias calles de Puerto Vallarta y que alarmó a vecinos –porque creían que era una balacera entre narcos y policías--, se informó que se trató de un operativo que realiza en la ciudad la División de Investigación de Robo de Vehículos de la Fiscalía General de Justicia; y que lo del Mazda fue porque el automotor tenía reporte de robo con violencia en Guadalajara.
Los judiciales notaron irregularidades del Mazda blanco cuando transitaban por la calle Insurgentes del centro de Vallarta, por lo que ingresaron los datos de las placas JJK-29-49 y el reporte fue positivo de coche robado.
Sin embargo, antes de que pudieran marcarles el alto a los conductores del carro de lujo, éstos se dieron a la fuga al notar la presencia de los policías investigadores. Fue así como comenzó la persecución que alertó a varios ciudadanos, toda vez que los presuntos delincuentes enfilaron hacia la calle Aquiles Serdán, luego subieron por Naranjo y al llegar a Francisco I. Madero se bajaron y huyeron corriendo en sentido contrario, por lo que ya no pudieron ser detenidos.
El automóvil quedó a disposición del Ministerio Público.