Apareció a las 5:15 vestido de blanco moviendo las manos como para llenárselas de sangre, se había puesto lidocaína para no sentir el dolor, los clavos eran dos, largos y delgados la herramienta un marro corto muy usado. No pasa nada decía Juan, debemos honrar la palabra y aquí estoy listo. A lo lejos, Vicente Fernández entonaba hermoso cariño, mientras la gente se juntaba alrededor del moderno mártir político ya sentado en la cruz de madera.
Pero, al principio no era el Líder de Colosistas Unidos AC el que sería clavado, sino uno de los activistas políticos jóvenes, su nombre Daniel Campos. Donde esta Daniel? Le dio chorro dijeron y nunca lo encontraron.
“por la soberanía republicana, por el derecho de nuestros niños que carecen de parques recreativos, de espacios para desarrollarse, porque los gobiernos nomas pintan y repintan los fierros viejos que dicen son jueguitos infantiles ¡mentiras¡ eso y mucho más fue lo que me llevó a tomar la decisión de que mis brazos sean clavados a una cruz para sentar un precedente en los padres de familia, en las autoridades y en los ciudadanos para que no olvidemos que hay niños pidiendo ser rescatados de las garras del vicio la imagen es muy mala, viendo emborracharse a los grandes, viendo fumar mariguana, drogándose a los jóvenes en todos lados, es vergüenza y no la tenemos, eso es lo que me mueve. Sabemos que estos actos no quedan así nada más, este acto se va a divulgar por todos lados. Quiero que llegue a su corazón y a la cabeza de todos los padres de familia y de todas las autoridades, que se les quite lo corrupto y que un día no muy lejano, un funcionario será clavado en una de estas cruces!!!!
Por eso y muchas cosas que suceden en este lindo puerto, les decimos al pueblo de Vallarta, que es la hora de hacer conciencia por nuestros niños, es la hora dijo enfático Juan, del buen gobierno, por eso nuestros letreros dicen que “Seremos los primeros vigilantes porque solo importa el futuro de nuestros hijos como dijera Luis Donaldo Colosio Murrieta”, nunca olvidare esas palabras de un hombre valiente que por miedo le quitaron la vida no lo dejaron trasformar el México que él visionó…” Emocionado el líder de los colosistas mensajeo a lospresentes y se juntó más gente.
No estoy loco aseguró Juan, honro mi palabra, dijimos que esto iba a pasar y pasará, yo asumo toda la responsabilidad, es mi voluntad.
Clávame pues ordeno Juan, el encargado de hacerlo se arrodilló con el primer clavo, la policía municipal llegó para persuadirlo. Juan insistió, es mi voluntad. La preventiva de blanco pedía órdenes a los jefes, solicitaron la presencia de un médico, Juan permanecía acomodado en la cruz, ¡DEJENME YO QUIERO HACERLO¡¡¡ pero hay niños, habrá sangre, y puede haber consecuencias para su salud, alegaban los policías, pero usted es libre de hacer lo que quiera, solo cuidamos el orden público insistía la autoridad, permita que llegue un médico.
Pasó el tiempo y el médico no llegaba. La gente se juntaba alrededor de la cruz y al atrevido mártir de la tercera edad; a lo lejos, las gaviotas en suave vuelo ignorantes de lo que abajo pasaba, en los arcos, se organizaba el evento Letra en la Mar y en el mar adentro, un turista viajaba en chinga en un parapente motorizado con rumbo al norte.
¡Si no es Dios, que lo claven de cabeza¡ dijo alguien. Sonó un teléfono…no puedo contestar, estoy en un viacrucis en la plaza de Vallarta dijo una señora… ¡ayy Dios dijeron otras mujeres que hace este hombre? Se va a clavar le contestaron otros… ¿Y los clavos? Son esos le señalaron
--Pos están muy delgaditos se pude desgarrar opinaron algunos--…
Un teatrero dijo que habían montado Jesucristo súper estrella y tenían que crucificar a tres, que solo amarraron y que había sido un gran problemas mantenerlos erguidos por 10 minutos, la gravedad impulsaba los cuerpos al vacío…
--¿Qué pasó?-- le preguntaban a los policías.
--¿Se va o no a clavar el señor?—
Todos con sed de lujuriosa morbosidad esperaban el momento. No llegó el médico, los policías se arrodillaron y le dijeron por última vez: --¿Podría manifestarse de otra manera?-- ¡NO¡ fue la seca respuesta.
--Bueno, entonces le vamos a tomar sus datos por si le pasa algo, pero no le vamos a permitir que se clave.--
Las vendas eran muy delgadas, la cruz no soportaría el peso muerto del cuerpo.
--¡Juan¡-- le gritó a su esposa con el hijo de meses en brazos --levántate, no te van a dejar, no ves que el gobierno amenazó a Daniel para que no viniera—
--No mujer, a Daniel le dio Chorro--.
Juan se levantó y prometió cumplir con su palabra… llegará crucificado a la plaza…
“No te metas con mi Cucu” ambientó a lo lejos el viacrucis de la plaza en un día de campañas políticas.