Tiendas como Walmart y Sams que se ubican sobre la avenida Francisco Medina Ascencio en su cruce con Prisciliano Sánchez, registraron una fuerte demanda de comida enlatada –principalmente atún, sardina y frijoles--, así como de agua embotellada, huevos, leche y pan blanco.
Los estantes de latas de atún son los que más buscaba la gente, mientras que el área de artículos eléctricos fue otra de las más visitadas y en donde se agotaron las lámparas de pilas de todos los tamaños; a las 10:00 de la noche ya no había este dispositivo.
Algunas personas llegaron a toda prisa para cargar todo lo que pudieron en su carrito de súper mercado, y de momento las cajas registraron filas que hicieron tediosa la compra.
El estacionamiento estaba prácticamente lleno, pero con suerte encontrabas lugar, dijo una señora que estaba desesperada por comprar algo de comida para pasar el fin de semana “pues dicen que el huracán viene fuerte y que nos va a golpear”.
En otras tiendas como Home Depot, los artículos más solicitados fueron las lámparas recargables y de pilas, así como tablones de madera para reforzar puertas y ventanas, sin olvidar la cinta para sellar los cristales de los ventanales.
Y aunque no fueron precisamente compras de pánico, muchas persona así lo hacían sentir, al aglomerarse sin ningún orden y entrando al estacionamiento en sentido contrario, donde tránsito municipal brilló por su ausencia.