Fueron más de doscientas personas en su mayoría turistas, las que se congregaron a un costado de la escultura del caballito y que hicieron fila para degustar de un pedazo de rosca y chocolate caliente, mientras deleitaban el bello atardecer de la ciudad.
Además de esta rosca, la administración y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia organizaron en las cuatro delegaciones del municipio.