El escándalo que viene será mayúsculo cuando se den a conocer los nombres de los favorecidos, porque se trata de personas que no tenían la antigüedad suficiente en el puesto, ni los méritos para sindicalizarlos, y que, sin embargo, los metieron con calzador, por sus pantalones pues, a la nómina municipal.
Lo peor de todo es que muchos de estos nuevos sindicalizados fueron dados de alta en la nómina municipal con un sueldazo que, ahora sí parafraseando a López Obrador, ni Obama lo tenía.
UN ADELANTO
Pero bueno, aquí les vamos a dar una probadita, tan solo un pequeño adelanto de la lista los listos, es decir, de los oportunistas, cuyos patriarcas y matriarcas, los dejaron incrustados en la nómina del Ayuntamiento para que el pueblo de Vallarta los mantenga.
Anote usted, por ejemplo, a una tal Zury Zepeda, quien es ni nada más, ni nada menos, que la asistente de la priista Rocío Zerón, a quien dejaron con un salario de ocho mil pesitos quincenales. Esta mujer no tiene mucho tiempo trabajando en el Ayuntamiento, pero el favor se lo hicieron “desde arriba”, por ser no amiga, sino amiguísima de Rocío Zerón, una de las funcionarias fuertes de Desarrollo Social, muy ligada por cierto al alcalde con licencia.
Otra es Mercedes González Romo, una joven que trabaja como fotógrafa y también es encargada de editar videos en la Dirección de Comunicación Social. A ella la recomendó el director-editor del periódico “El Sol Siempre Libres”, Héctor García Colín, solo porque es su pareja sentimental.
En este contexto hay que revisar el trabajo de Mercedes González, pues al parecer hacían negocio con la elaboración de videos, ya que le solicitaban a García Colín la toma de videos, le pagaban y ella ayudaba a editar.
Pero bueno, aquí hay que hacer una pausa, una reflexión y preguntarnos por qué carajos una persona externa, que no trabaja en el Ayuntamiento, se pudo dar el lujo de pedir que sindicalicen a su novia, y todavía más indignante, que el gobierno municipal doble las manos y acepte enviarla la nómina con 500 pesos diarios.
LAS PODEROSAS Y LOS SINVERGÜENZAS
Otra, muy conocida en los pasillos de la UMA, es la poderosa asistente de la tesorería municipal, de nombre Rosa; a ella también le hicieron el favor y será una de las nuevas sindicalizadas, pero con un súper sueldo.
Una más es Yadira de la Cruz Ruelas, otra auxiliar de un influyente funcionario; y así por el estilo… aparecen nombres de muy conocidas damas como Adriana González López (esta, jubilada cuatro años y medio antes), Consuelo, Yadira, y las que faltan, pues también ha trascendido que dieron de alta a 10 nuevas trabajadoras –chicas de cierto perfil—con el propósito de que cobren en la nómina.
Y para que usted se vaya para atrás, también pidieron ser sindicalizados funcionarios como el sub-director de Participación Ciudadana, César Magaña; el Director de Desarrollo Social, Jorge Durán; la Directora del DIF, Celina Lomelí y la propia Rocío Cerón; así, sin el menor rubor de vergüenza ya lograron perpetuarse en un cargo público, quizás porque simplemente no la tienen.
GIL, ROBA A SINDICALIZADOS DE ASEO PÚBLICO
Pero las cosas se van a poner más feas --y esperemos que el equipo del profesor Luis Michel tenga la voluntad política para ponerle un alto a tanto pillaje--, y es que un grupo numeroso de trabajadores de aseo público, que tenían más de cuatro años cobrando en lista de raya un miserable salario y que pedían una oportunidad para que los sindicalizaran, están siendo objeto de un robo descarado por parte del secretario del sindicato, Gilberto Lorenzo y su licenciada, una abogada de nombre Lucía Curiel, pues les comenzaron a descontar de su nómina entre 400 y 500 pesos quincenales, que dizque por “caja de ahorro”, sin que ellos lo hayan pedido, ni estado en el supuesto de ahorro en la caja, pues reiteramos, apenas los sindicalizaron.
La respuesta que obtuvieron fue una bofetada en pleno rostro, ya que al reclamarle a Gilberto Lorenzo el por qué de semejante descuento, éste les respondió que desde el año 2018 ya tenían sindicato, y que deberían pagar lo “atrasado”, al menos, les dijeron, de julio a noviembre.
Desde luego, esto fue interpretado por los trabajadores de aseo público como un cobro indebido que les está haciendo Gilberto Lorenzo por el “favor”, es decir, por sindicalizarlos.
En el enjuague y componendas de Gilberto Lorenzo está metido, hasta las manitas, el Oficial Mayor Administrativo, Raúl Juárez Ruiz, hombre de todas las confianzas del nuevo regidor Diego Franco Jiménez.
HANER OCAMPO, JUBILADO CON 39 MIL PESOS
Todo esto, sin contar los favorecidos con las jubilaciones, que también son numerosos y donde hay casos tan escandalosos como el de un tal Hanner Ocampo Jaimez, que supuestamente es sub-tesorero municipal, pero lo señalan como “aviador”, y a quien jubilaron con un sueldo de mil 300 pesos diarios, es decir, 39 mil pesos mensuales, algo oprobioso.
Algo parecido sucede con el Director del Consejo Municipal del Deporte (Comude), José Amador Hernández Madrigal, agraciado con otra jugosa jubilación.
En la misma bolsa de premiados está el titular de Protección Civil y Bomberos, Adrián Bobadilla García, quien era oficial primero y hace cinco años lo invitaron a formar parte del equipo de Arturo Dávalos y a tan solo 14 años y medio, lo jubilan con sueldo de director.
Otros como un tal Pedro Vázquez, a quien apenas hace un mes le subieron el sueldo, y con ese salario lo jubilaron; o Antonio Rangel de Catastro Municipal, él entró en la administración de Gustavo González Villaseñor y resulta jubilado con un súper sueldo; también aparece un tal Ramiro de Reglamentos, que apenas tenía ocho años trabajando en el Ayuntamiento, y ya lo jubilaron.
También quienes controlan el sindicato de burócratas se despacharon con la cuchara grande, pues familiares de Gilberto Lorenzo tuvieron tres nombramientos en tan solo tres años, claro, para ganar más.
Atrás no se quedó el famoso “Clinton”, algo así como el segundo de a bordo del sindicato, quien metió a su esposa a trabajar para que cobrara un sueldo similar al del marido.
Sin duda, la lista total irá saliendo poco a poco; desde luego, habrá sus muy honrosas excepciones, de empleados municipales que sí merecían ser sindicalizados o jubilados, por el tiempo que tenían trabajando; pero la mayoría fue porque les hicieron el favor, ya sea por amiguismo, noviazgo, concubinato etc.