Lo anterior, luego de la denuncia pública que hicieron vecinos de la colonia Niños Héroes –a través de este medio de comunicación—en el sentido de que la matriz de las carnicerías “Sierra Costa”, que se ubica en la calle 13 de septiembre, estaba arrojando vísceras, sangre y grasas al drenaje público, lo que ocasionó que se taparan los desagües y que la pestilente agua contaminada brotara por las coladeras de los baños y cocinas de las casas aledañas.
Por ello, el Seapal tomó cartas en el asunto y la dirección envió personal para verificar el estado que guardan estos establecimientos comerciales y para sorpresa del organismo, descubrió que 11 de las 22 carnicerías que están distribuidas por toda la ciudad, no cuentan con la trampa de grasa obligatoria y que por este descuido habían estado arrojando al drenaje todo tipo de desechos, lo que además provocó daños a la red del sistema, tanto en las bocas de tormenta como en las alcantarillas que conducen a los colectores por donde corren las aguas negras y grises del municipio.
En este contexto, el director del Seapal, Carlos Alberto Ruiz, confirmó que luego de que el personal a su cargo realizara una revisión en dichas carnicerías, se detectó que, efectivamente, 11 de las 22 no cuentan con trampas de grasa, por lo que se les dejó un apercebimiento a los encargados de estos comercios para que corrijan a la brevedad esta anomalía y pongan sus respectivas trampas.
Carlos Alberto Ruiz comentó que desde la semana pasada se notificó a los responsables de las carnicerías y se les dio un plazo perentorio, que vence mañana viernes, para que instalen sus trampas de grasas en los 11 negocios, pues de no hacerlo, procedería una multa y hacer caso omiso, podrían ser clausuradas, ya que dañan el medio ambiente, afectan a vecinos y dañan la infraestructura urbana.
Sobre los daños ocasionados a la red del sistema de drenaje, dijo que el Seapal va a llevar a cabo algunas mejoras en colectores, bocas de drenaje y pozos, porque eso le corresponde al organismo, pero que las afectaciones visibles sí las tendrá que pagar el o los propietarios de las carnicerías.
Carlos Alberto Ruiz recordó que todos los establecimientos que generan grasas y otros desechos, están obligados a tener sus trampas y por cuenta de los dueños, contratan los servicios de pipas que se llevan estos residuos, los que después son depositados en la planta de tratamiento norte II de Ixtapa para su tratamiento final con químicos, junto con las aguas negras.