Los militantes y simpatizantes de PVEM en Bahía de Banderas le reconocen al diputado Álvaro Peña su trabajo por el partido. Pero no están del todo satisfechos. Se retiraron del MC y notan vicios idénticos, particularmente el manejo del partido como franquicia política. También tienen quejas sus dirigentes, pues a una semana de la campaña en Tepic, les tienen detenidos los apoyos. Recorren las calles sin entregar material propagandístico. Dejan solo el discurso, pero sin un tríptico, o cuadernillo de sus propuestas.
En esas condiciones, realiza campaña Cristina Farías Álvarez. Se registró en la demarcación XIII para ser regidora. Es oriunda de San Juan Papachula, asentamiento apéndice de San Juan de Abajo, que sus contados moradores podrán votar por ella pues el macizo de la demarcación reside en Valle de Banderas. Es licenciada en Administración de Empresas, egresada del Centro Universitario de la Costa de la UdeG, el plantel localizado en Ixtapa. Como todos los militantes del Verde Ecologista en Bahía de Banderas, apuestan a la sensibilidad y conciencia de los electores y se dedican a erradicar al político tradicional que solo se preocupa por enriquecerse a costa de los recursos de todos los habitantes.
En cualquier otra circunstancia sería un lujo tener entre sus militantes y candidato a talentos como Cristina Farías. Los electores claman por nuevos rostros y piden propuestas frescas. La joven universitaria se fija en las condiciones de los habitantes de su demarcación y no descansa en buscar soluciones y transformarlas en propuestas viales y de valía para las familias. No es un elector industrializado ni tampoco ha llegado a ellos la bonanza de la industria sin chimeneas. Es un sector donde abunda la tierra agrícola, pero es predominante la agricultura. Cuando a los campesinos no les llegó el financiamiento y el gobierno canceló créditos y todos los apoyos, la tierra “dejó de dar” y voltearon a ver el futuro, a otros horizontes. Sin embargo, eso no cancela el esfuerzo por ofrecer canales de comercialización de los productos y cosechas de la tierra, ayudar a obtener crédito, financiamiento y todos los programas y hacer rendir la tierra.
No es mucho lo que desde una regiduría se puede hacer, pero Cristina Farías no renuncia a sus ganas de ayudar a los suyos. Procura rodearse de profesionistas y le ayudan a elaborar propuestas e ir con ella de la mano y juntos persuadir a los ciudadanos de atreverse a dar un giro en beneficio de todos.
El reto de Cristina es monumental, pues las primeras trabas las halló dentro de su partido. Desde la dirigencia estatal, donde despacha José Antonio “el tony” Contreras Bustamente, ha habido un grosero manoseo en el proceso de selección de candidatos. Al dirigente en Bahía de Banderas, Fidel Ramírez Carrillo lo pararon en seco cuando apenas hurgaba entre los suyos la posibilidad de postularse. Consideraron seriamente a Gustavo Paredes González, pero por razones jamás explicadas a la militancia local le cancelaron el respaldo. Cuando el partido supo de los sinsabores de la ingeniero Lourdes Ruiz Nieves y sus deseos de irse del PRI, la buscaron, pero se les adelantaron los Guerra, dueños estos del MC. Los naranja le dieron atole con el dedo, le negaron hacerla candidata y entabló otra vez contacto con el PVEM. De Tepic la palomearon, pero de un día a otro le avisaron que siempre no. Al final parece haberse decidido por Laura Amaral Platas, la hermana de la famosa Chabelita Becerra, que luego de ser regidora, el PRI la desechó por sus vínculos con la pandilla del ex alcalde Héctor Paniagua Salazar. Hasta el momento que el partido mantenía a Paredes como su candidato, Laura Amaral aparecía en la planilla en calidad de candidata a síndico.
No es fácil entender ni saber los pasos ni tampoco advertir hacia dónde se mueven los dueños del PVEM. Hasta ahorita lo único claro es que el hermano del Cheque Peña no quiere saber nada de sus vecinos, Adrián Guerra Padilla, ni de los hijos de éste, “el chito y “el moy”. Desde que trascendió de sus negociaciones con Gustavo Paredes se dio por hecho el acercamiento con el diputado local y candidato a la alcaldía, Héctor Santana García. La coalición entre estos dos partidos fue restringida y limitada a solo 5 de los 20 distritos electorales, dejando en libertad de seleccionar a todos los candidatos a alcalde. Empero, en Bahía de Banderas, el dueño del partido, ya muerta su “sociedad” con los Guerra, abrió la puerta a su alianza de facto y con los priistas, en concreto con Héctor Santana.
Más allá de los candidatos a gobernador, alcalde o a las diputaciones, en las demarcaciones se les abren posibilidades de ganar a cualquier aspirante a regidor que cumple los requisitos de ser el mejor vecino, el más capaz y mejor preparado, el que ofrezca las mejores propuestas y sea capaz de convencer a la mayor parte de los vecinos con credencial de elector y alzarse con el triunfo. Esa es la meta de Cristina Farías. Apuesta a la madurez de los ciudadanos. Confía en que se animen a dar ese paso y volcarse a ella el día de la elección. No sería ninguna hazaña obtener más votos que un Cuco Reynoso, uno de las dinastías priistas que han carroñeado los recursos públicos.
“Yo si quiero ser diferente. No quiero ser como ellos” repitió la frase filosófica que la motiva y la anima en su aventura en una actividad que jamás soñó ejercitar, pero que al asumir la responsabilidad social de hacer algo por los suyos y empujarlos a salir del ancestral rezago.
REVOLCADERO
El Partido Verde Ecologista postuló en los distritos XVII y XVIII a Luis Alberto Arrizón Flores y a Roxana Patricia Pérez respectivamente. De la dama es probable que muy pocos la reconozcan, pero Luis Arrizon es bastante conocido en toda la zona conurbada, tal vez más en Puerto Vallarta que en Bahía de Banderas. Pero que los dos tienen todo el apoyo de Álvaro Peña y también de “el chino Tirado”, “el perico” y de “el cocho”, la vértebra que sostiene al dirigente local, Fidel Ramírez, éste a su vez depositario y administrador único de las confianzas del hermano del Cheque Peña.****** En privado, los Guerra se asumen y lo presumen como dueños únicos de la franquicia naranja en Bahía de Banderas y accionistas principales en Nayarit. Y si en público lo niegan, los hechos los desnudan. Hoy, uno de sus hijos, Moisés, es diputado federal a cual llegó por la vía plurinominal. El otro, “el chito” es regidor y también cobra sus casi cien mil pechereques al ser anotado en la lista de candidatos a regidor por la vía plurinominal. El padre, fue candidato a la alcaldía y por tercera vez fue derrotado. Ya antes mordió el polvo y en dos ocasiones, compitiendo por el PAN. La familia nomás no sabe ganar una elección y hoy, Moisés es el abanderado y está ya condenado a perder. Pero será el patriarca del clan, Adrián Guerra Padilla el que se encumbrará por primera vez y será diputado local. También por la vía plurinominal, pues se registró en la posición número 2, solo debajo de una hija del candidato a gobernador, Raúl Mejía. Total, le invierten por un lado, pero por el otro apuestan a ganar y recuperan toda la inversión. Y eso de invertir es un decir porque regularmente le inyectan a su campaña dinero ajeno.****** Este martes 9 se celebrará un debate entre los candidatos al gobierno de Nayarit. Al mismo habían confirmado ya asistir siete contendientes, Raúl Mejía, Manuel Cota, Miguel Ángel Navarro Quintero y Antonio Echevarría, además de los tres independientes, Hilario “el layín” Ramírez, Antonio Ayón y Víctor Manuel Chávez. Para el debate, programado a partir de las 19 horas, se habilitará el Teatro del Pueblo. Por cierto, platicamos con promotores del médico homeópata, Víctor Chávez y nos informaron que este fin de semana volverá a Bahía de Banderas y hará recorridos durante tres días. Ya antes visitó la región y visitó los poblados de la sierra.****** Bahía de Banderas amaneció la mañana del sábado con la noticia del fallecimiento del ex alcalde Rafael Cervantes Padilla. La muerte del charro y político sorprendió a muchos, pues eran pocos los que sabían de sus problemas de salud. Su deficiencia renal se complicó con un mal pulmonar que acabaron por colapsar sus arterias del corazón. Rafa Cervantes padecía problemas de diabetes y colesterol y aunado a lo primero fue a dar a un hospital privado de Puerto Vallarta en donde falleció a primera hora del sábado. Rafael Cervantes fue un alcalde polémico. Hizo sus pininos en la política dentro del PRI y emigró al saber que nunca le darían la oportunidad de ser alcalde. Aceptó la invitación de ir al PAN, se sometió a una asamblea municipal y ganó por votación mayoritaria el derecho a ser el abanderado. Sin embargo, fue llamado a las oficinas del CEN y el dirigente nacional le informó que le sería retirada la candidatura. Eran los tiempos que el PAN, en 2009, estaba controlado desde Los Pinos, cuyo huésped era Felipe Calderón. Negoció la candidatura a diputado por las dos vías, por el voto directo y por la vía plurinominal. Perdió en las urnas pero fue diputado “de partido”. En 2012 regresó a Bahía de Banderas, fue candidato y ganó la alcaldía. Pero a unas semanas como alcalde, anunció su reincorporación al PRI. Para muchos habitantes ha sido el peor presidente municipal de la joven historia del municipio. Bueno, su cuñado el actual alcalde, José Gómez Pérez amenaza con quitarle ese “honor”. Gómez como alcalde daba la impresión de competir con su cuñado por ser el alcalde más corrupto, por acumular más bienes, más ranchos, mas tierra, más ganado, mas caballos, más dinero en los bancos, más en todo.