El Movimiento de Regeneración Nacional no tiene posibilidades de competir y ganar en la elección 2018. De tres sólidos aspirantes que se abrían camino hace un año, se podría sostener que ya no queda ninguno. Uno, Salvador Cosío Gaona se eliminó por decisión propia cuando meses atrás descubrió que había dados cargados y él no tenía posibilidades. Apenas hace dos o tres semanas, un segundo, el empresario mazapanero, Enrique Michel organizó un festejó y ese fue su suicidio político. Se vistió de rey, hizo pasarela frente a sus invitados y recibió un merecido linchamiento popular.
El tercer aspirante de Morena a la gubernatura es precisamente Carlos Lomelí. Muy probablemente asuma la candidatura pero desde esta semana sus posibilidades son tan remotas que nadie con mediana sensatez podrá apostar un tostón a su triunfo.
El trabajo periodístico de los reporteros Édgar Ledesma y Stephanie Ochoa fue tan detallado en datos que lo “refritearon” diversos medios del país y por lo menos uno local tomó nota de lo más relevante. Es información originada a raíz de la detención de un presunto capo del narcotráfico, el mismo que arrastró al popular cantante Julión Álvarez y al futbolista Rafael Márquez.
“La empresa Servicios Educativos y de Negocios, relacionada con el diputado morenista Carlos Lomelí Bolaños, está fichada en la lista del Departamento del Tesoro de EU vinculada con el presunto narcotraficante Raúl Flores Hernández”, establece la información. Y en su primer párrafo subraya: “El diputado federal de Morena Carlos Lomelí Bolaños –con un patrimonio de 200 millones de pesos en bienes– se encuentra ligado a la red de lavado del cártel de Raúl Flores Hernández a través de Servicios Educativos y de Negocios, S. de R.L. de C.V, empresa fichada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, la cual el legislador ocultó en su declaración 3de3”.
De acuerdo con su 3de3, el diputado morenista reportó la posesión de 38 propiedades, entre terrenos, casas y departamentos, y otros en copropiedad con su cónyuge. La lista incluye 7 autos, un avión y una embarcación, así como obras de arte, joyas y menaje de casa, por 18 millones 873 mil 591 pesos. Dichas propiedades se localizan en Zapopan, Jalisco, aunque tiene algunas en Nuevo Vallarta, Guadalajara, Tlaquepaque y Tlajomulco”, consignó El Financiero. Resulta curioso que en Puerto Vallarta no reportó tener inversiones pues prefirió Bahía de Banderas donde proyecta destinar su predio a un gran centro comercial.
Nada se sabía de Carlos Lomelí hasta cuando incursionó en la política. Hizo su presentación en el PRD sin ganar nada, vaya ni siquiera popularidad. Desde ese partido “apadrinó” a panistas y Ramón Guerrero Martínez fue uno de ellos. Al motejado como “el mochilas” lo refaccionó en la campaña de 2012 y juntos aplicaron el programa de las “mochifarmacias”. Sin embargo, ya como alcalde “el mochilas” no le respondió a las expectativas y a los acuerdos con el empresario farmacéutico y rompieron compromisos. Hoy, el político de Ayutla procura acercarse a Lomelí para abrir camino a Morena. Recordemos que, a principios de este año, Lomelí se fue del PRD, que lo hizo diputado plurinominal, y se fue a Morena.
LA HUELLA DEL NARCO
En 2008, por primera vez fue ligado al narcotráfico, lo que trascendió pasados algunos años. Dos años antes había sido precandidato a gobernador por el PRD y reculó para aceptar la candidatura al Senado. Al legislador y a sus empresas lo investigaron por presuntas ligas al cártel de los Amezcua Contreras por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. Es la misma, empresa, Lomedic SA de CV, que apareció ahora con sus vínculos con Raúl Flores. De Lomelí y su empresa se sospecha de servir como fachada para lavado de dinero de la organización criminal, de acuerdo con una investigación de El Financiero.
Si figuras del deporte, como Rafa Márquez, o del espectáculo –Julión Álvarez- caen a los pantanos, no le vemos nada de raro que empresarios de alta codicia se arrodillen a las tentaciones del dinero sucio. Es demasiado sospechoso el andar y las relaciones tejidas por el aspirante de Morena al gobierno del estado. Tanta coincidencia solo es capaz de crear curiosidad al pueblo y animar se investigue si su fortuna es legítima. De las 38 propiedades reconocidas en su 3de3 todas se compraron en los últimos 20 años. Es decir, en apenas dos décadas el señor se hizo de la fabulosa fortuna de casi 200 millones de pesos. Eso es lo que reportó. Cabe la posibilidad de que a través de prestanombres, con la ayuda de interpósitas personas, oculte otros bienes.
A los capos del narcotráfico les gusta crear amistades y relaciones, también sociedades empresariales, con personajes de la política. Ignoramos si Lomelí es una máquina de hacer dinero, un rey Midas, pues casi todos los bienes que compró en esas dos últimas décadas los pagó en efectivo. Quienes pagan en una solo exhibición hacen gala de poseer mucho, mucho dinero. Y son los capos quienes inusualmente tienen efectivo de sobra.
Si el dinero de Lomelí ha sido contaminado por el dinero sucio de los malosos, ahora él se propone ensuciar planes y proyectos, también ideales y colores partidistas. Lomelí ha persuadido con su dinero a individuos como Héctor Gallegos, Roberto Ascencio, a muchos otros doctrinarios de la izquierda, y lo han adoptado como su “candidato” a gobernador por los colores de Morena.
Si el mandón de Morena y único dueño del membrete Morena, Andrés Manuel López Obrador se encandila con el sospechoso dinero de Carlos Lomelí, éste será el candidato. Y en una sociedad que aun retiene valores conservadores las posibilidades de aumentar el caudal de votos será nulo. En Jalisco Morena a duras penas podrá computar arriba del diez por ciento de la votación y con el empresario de las farmacias, salpicado por el dinero del narco, ese costal de votos se reducirá. Claro, cabe la posibilidad de que AMLO le retire ese apoyo. Es lo más sano y recomendable, por salud de la política y por el bien de Morena.
Mientras tanto, que a Lomelí se lo disputen “el mochilas” y Gallegos. Los dos podrán ganarse su refaccionamiento para sus campañas.
REVOLCADERO
Fueron 20 los comités seccionales de Morena en la zona de El Coapinole los que tomaron protesta la tarde de domingo en el Club de Leones de El Pitillal. Su enlace en Jalisco, Alejandro Peña Villa estuvo a cargo del evento. Y la estrella invitada fue el diputado federal, Carlos Lomelí Bolaños y obligadamente debía tomar el micrófono y dar su mensaje. La periodista Martha Ramírez reportó en su portal Contralinea: También hizo uso del micrófono el aspirante a la candidatura de Morena a la gubernatura, el diputado federal Carlos Lomelí Bolaños, quien hizo un recuento de los efectos letales de las reformas estructurales y el abandono del campo. Asimismo, destacó la necesidad de apoyar a Andrés Manuel López Obrador, pues es un hombre que en más de 15 años de estar en la lucha; el sistema y contrincantes políticos “le han buscado pero no le han encontrado nada”. Ni duda cabe que la bufalada de Morena esta con Bolaños. La izquierda, si es que los de Morena son de una izquierda genuina, se siente cómoda con un capitalista de candidato. Y además, se trata de un empresario que arrastra sospechas de su riqueza, que ha sido investigado aquí y en Estados Unidos. ****** De Carlos Lomelí podemos añadir que fue en Jalisco uno de sus fundadores. Pero olfateó que ese partido no tenía futuro, en inicios, y se fue al Movimiento Ciudadano. Sintió que con Enrique Alfaro podía cumplir su sueño de ser gobernador. Apoyó con todo a Alfaro en su fallida candidatura del 2012 por el MC. Compitió en un distrito de Zapopan y perdió, empero alcanzó (Lomelí) la diputación plurinominal. Pero como Alfaro va a repetir en la candidatura naranja, lo aceptó sin respingar. Pidió para quedarse en el MC una condición: la candidatura a la presidencia municipal de Zapopan. Pero resulta que Pablo Lemus tenía el visto bueno de Alfaro y va a buscar la reelección. Fue entonces que pidió le regresaran sus canicas y se fue de regreso a Morena. Desde este partido, peloteado por los vecinos del norte y la PGR, le urge a los morenos vallartenses lo respalden.****** Como a muchos, nos asombró ayer ver un boletín de prensa difundido por la Cámara Nacional De Comercio en donde se extiende la invitación pública a una conferencia que dictará este viernes 18 el ex gobernador de Puebla y precandidato a la presidencia de la república por el PAN, Rafael Moreno Valle. “Busca Canaco abrir diálogos con figuras públicas para el beneficio y desarrollo de la región” se puede leer en el documento que bien se lo podemos atribuir a la presidenta de la Canaco, Teresita Marmolejo López. “Puerto Vallarta, Tomatlán, Cabo Corrientes, Talpa de Allende, Mascota y San Sebastián del Oeste, representados a través de la Cámara de Comercio, tendrán la oportunidad de conocer los proyectos de las figuras públicas a nivel nacional y local que aborden temas en el desarrollo de cada uno de los municipios” se indica en un párrafo. Hasta donde sabíamos, organismos empresariales como la Canaco se proclaman como apolíticas y cuando alguien de sus directivos tienen aspiraciones, por estatutos se les conmina a retirarse de su cargo para dedicarse a la política o a algún cargo de elección popular. Tal vez por eso se anotó al final: “La presidenta de Canaco Servytur Puerto Vallarta, Teresita Marmolejo López reiteró la convocatoria a todas las figuras políticas a abrir un espacio para encuentros de dialogo en la región sin distinción de “colores partidistas”, con el ánimo de trabajar a beneficio del comercio, servicios y turismo de la región”. A leguas se nota que Teresita desea ver su nombre en alguna boleta electoral; y si es la del PAN, mejor.