Contra todos los pronósticos, el PRI sigue haciendo gala de imponer a personajes de dudosa calidad moral, humana y hasta vinculados a actividades nada lícitas. Si la apuesta nacional es exhibir al candidato del Frente Por México, Ricardo Anaya, con José Gómez Pérez dan bastante, pero bastante material para que el tricolor no salga de esa lucha de lodo que hoy libra con varios actores políticos.
Pero concentrémonos en el caso del tercer distrito en Nayarit. Su designación tiene varias lecturas, pero las más sonadas en el ambiente político nayarita es la que el organizador de bailes, ahora ya antrero, es la que el espacio le permitirá tener voz y voto para el 2021, cuando venga la sucesión de los poderes locales. José Gómez sabe bien que no tiene nada que pelearle a Héctor Paniagua y al mismo gobernador Toñito Echeverria; por lo que cuidar la posibilidad de alzarse con la candidatura para alcalde por el PRI en el ‘21 o tener la posibilidad de imponer a alguien, es su verdadera apuesta, no hay más.
La otra y la que corre entre las venas de los traicionados es la que su presencia en las boletas obedece a la búsqueda del fuero por las innumerables cuentas pendientes que tiene con la tesorería municipal, cuya dependencia, al escribir esta columna, con seguridad ya hizo entrega del desglose a detalle de los faltantes de dinero que debe comprobar Carlos Ríos, ex tesorero municipal de Gómez Pérez, quien también ya la hace de antrero ahí por lo rumbos de San José del Valle.
EL RASTRO INDELEBLE DE LA CORRUPCIÓN
Y es que déjenme decirle que el señor Gómez dejó un caudal de hechos corruptos en la pasada administración, como procesos de licitación amañados por el personal que dejó encargado Edgar Veytia, que impuso en la jefatura de la dependencia encargada de esto, a un sujeto de nombre Antonio Zepeda.
Pero no sólo eso, también hay rastros indelebles del desmembramiento del parque vehicular; desvío de dineros federales como el del puente vado de San José del Valle; laudos perdidos a modo; concesiones que se dejaron perder a a petición de parte; descuentos ilícitos en licencias (como las suyas cuando organizaba bailes), renta de maquinaria a precios desorbitantes…. Es sólo una pequeña parte de lo que hay en el reporte de entrega-recepción que Gómez Pérez deberá atender a la brevedad, y que deberá explicar puntualmente.
No nos extrañe que hasta el mismísimo titular de la Auditoría Superior acuda al municipio de Bahía de Banderas a realizar personalmente los levantamientos de las muestras de esta escandalosa corrupción; algo que no debería confundirse con guerra sucia, sino todo lo contrario. Y es que José Gómez Pérez abusó de ingenuo –o pasado de listo como usted quiera llamarle-- y su designación coincide con este proceso inaplazable para rendir cuentas.
LOS DÍAS DE ANGUSTIA
A su salida del gobierno municipal, José Gómez logró librar la penal. Esto es cierto, ya que para todos es sabido que el priista andaba a salto de mata por la posibilidad de que fuera a ser detenido por la fiscalía; tal y como sucedió con su guardaespaldas personal apodado "El Keni".
En Bahía de Banderas se sabe que salió huyendo a Michoacán y de paso se daba una vuelta por Colima para ver cómo iban sus negocios. El hecho es que en el último mes de su gobierno apagó su celular y dejó de hacer transmisiones en vivo y tomarse fotos. Su ausencia en medios de comunicación y en su muro de Facebook se notó.
Pero como todo cuasi delincuente a veces tiene suerte, José la tuvo, y fue al cambio de gobierno cuando el señor Gómez Pérez sintió otra vez esos aires de libertad y tranquilidad… pero a medias, ya que todavía está pendiente el hecho de que no puede visitar los Estados Unidos de América… al menos esa habría sido la instrucción de su equipo jurídico.
LA HUELLA DEL DINERO MAL HABIDO
Sin embargo, los ex colaboradores de José Gómez se comportan como ladrones de bancos que no saben esperar y guardar el dinero mal habido durante algún tiempo, sino que ya presumen sus negocios y su ingreso al sector empresarial de Bahía de Banderas. Es algo que nadie da cuenta y menos por los ingresos alcanzados por cada uno de ellos durante su paso por el gobierno municipal. Si los investiga el SAT, no pasarían los filtros.
La ruta del dinero que José Gómez obtuvo a su paso como presidente municipal de Bahía de Banderas, se puede ver e investigar en negocios como Gollife, Nirvana, Tangamandapio, La Campiriña y una fábrica de Agua y embotellados que operará su ex director del Oromapas, Juan Gabriel Ávalos Lemus.
Y es que estos son parte de los negocios de los que todos saben en Bahía, está detrás José Gómez.
El ex alcalde también está metido en el ramo ganadero y tablajero, pues el Michoacano compró bastante ganado fino durante su administración. ¿Pero qué creen? No le está yendo bien y se habla que anda abaratando su negocio; y más ahora con el desprecio que hay en el gremio hacia su persona, toda vez que desde el poder les hizo la vida de cuadritos a los que no eran sus amigos. Ahora ya en cancha pareja, se las están cobrando.
HASTA PROBLEMAS DE ALCOBA
Por si esto fuera poco, José Gómez también está por tronar con el negocio de los bailes, por una presunta infidelidad conyugal que fue expuesta por el mismo ex alcalde durante el concierto baile de Pepe Aguilar en días pasados.
Todos dicen que de plano ya perdió rumbo hasta en su esencia: la organización de bailes. Esto desde que tuvo serios problemas con su suegro, quien es el dueño de la Plaza Mariana de San José del Valle.
Todo nació desde aquel último evento que organizó José Gómez en ese lugar, al que fue acompañado de todos sus ex compañeros y otros más que lograron pagar las costosas entradas.
El evento fue un fracaso, pero más para el organizador, ya que en la zona VIP le dio por llevarse a una “amiga” que nada le agradó ver a su mujer. Monse, la esposa de José se puso furiosa y ni tardo ni perezosa fue y le armó un numerito al ex presidente municipal, que por poco desemboca en una tragedia.
LA LEONA DORMIDA
Dicen los que vieron el escándalo conyugal, que la ex titular del DIF Bahía de Banderas despertó de su letargo de leona dormida y no se aguantó el coraje y se dirigió a la zona VIP para sacar a empujones a la dama intrusa que con todo el descaro del mundo llegó acompañada del marido de ex primera dama.
José Gómez se hizo el cínico, pero cuando vio que “sus” mujeres estaban agarradas del chongo –y de algo más— se metió en medio de la trifulca y emulando a Manuel Galindo cuando la hace de referi en las peleas de box en Vallarta, gritó: ¡Stop! Y quiso separar a las aguerridas señoras.
Lo más vergonzoso fue que José Gómez tomó partido, le dio preferencia a la “amiga” y sacó a su mujer de la zona VIP, dándole preferencia a ella, a la otra, como si nada hubiera sucedido; lo que provocó la ira y el enojo colectivo de los parientes de la esposa, quienes para pronto se le fueron a la yugular a la otra dama y la sacaron del concierto baile casi a patadas, contra el coraje y berrinche de José.
En Bahía se afirma que el suegro de José le prohibió volver a hacer bailes en la explanada Mariana, por la afrenta que le hizo a su hija… Pero más tarde, ya punto jarras, el ex alcalde habría dicho que no le importaba eso, que él tenía dinero para comprar en ese mismo momento, si él quería, un terreno aledaño que cuesta algo así como 22 millones de pesos y ahí seguir haciendo sus bailes.
Con estos escándalos y la línea de investigación que se le sigue a José Gómez por el caso Veytia y los índices de corrupción en su gobierno, nadie se explica cómo el PRI lo volvió a considerar como su abanderado a diputado por el 03 distrito.
A menos, dicen, que lo quieran proteger par que no pise la cárcel e involucre a otros connotados priistas de Nayarit en el lodazal que se sigue destapando en contra del ex fiscal y del ex gobernador Roberto Sandoval.