Hoy, con Enrique Alfaro como gobernador electo, no es la excepción. La oficina respira ciertos aires que atraen el interés de activos “grillos”, vallartenses y no, con pretensiones de despachar en el lugar donde por casi dos décadas fue jefe el nacido en estación Yago, Nayarit.
La Secretaría de Turismo de Jalisco, la Setujal, tiene oficina en la planta alta del edificio UNIRSE y ya la desaloja Ludwig Estrada. Con él ya se presentó la ex regidora Susana Rodríguez Mejía a recibir la oficina. Esta dama es de un perfil totalmente grillo. No es turistera. De turismo, sabe lo aprendido en los últimos tres años por presidir la Comisión de Turismo en el pasado Ayuntamiento. Al relevo es terso. No es necesario ejercer presión ni violencia para desocupar el espacio.
El titular de la Setujal será German Ernesto Ralis Cumplido. Turistero por excelencia tampoco lo es. Hace ya algunos años fue presidente estatal de la Cámara de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados, la Carnirac. También se ajusta al perfil político. Hizo algunos estudios superiores, en el área de las ciencias políticas y sociales, pero no los concluyó. Haberle ganado en 2015 un distrito electoral al PRI de Alfredo “el güero” Barba en Tlaquepaque es su máxima carta de presentación. Antes de esa elección, fue regidor en el trienio 2012-2015 en ese municipio alfarero. Fue alcalde pero los priistas lo apalearon. Este dato revela que no es una perita en dulce. O bien que no sabe granjearse el apoyo del vecino ni de los ciudadanos.
Entonces, el secretario de Turismo del estado no es turistero pero si es empresario. Su trayectoria nos dice que es “tortillero” pues alguna vez presidió el Consejo Regulador de la Mesa y la Tortilla (CRMT). No sabemos si es dueño pero sí que fue director de “Agios Aggelos Restaurantes”.
Bien, ubiquémonos el sábado 9 de marzo de 2013. A media mañana trascendió ese día el asesinato de José de Jesús Gallegos Alvarez. Una semana antes había sido designado secretario de Turismo por el gobernador Aristóteles Sandoval Díaz. Éste sí era turistero, empresario del ramo y sabía de la industria sin chimenea. Aquí en Puerto Vallarta era propietario de varios desarrollos. A cumplirse seis años, muy poco se sabe del móvil de su ejecución. A lo sumo, se rumora haber sido “prestanombres” de un grupo enemigo del cartel local.
Tres días antes, el nuevo titular de la Setujal llamó a su oficina a Ludwig Estrada. En la antesala pudo ver a Fernando Castro Rubio, quien había sido sindico hasta el último día de 2012. Cesar Langarica, quien hasta ahora funge como “administrador” del edificio de la UNIRSE, también hacía presencia. Pero José Luis Díaz Borioli era el estelar. A ojos de todos se desempeñaba como una especie de “secretario particular” de Gallegos. Se supo entonces que había sido nombrado director general de la Setujal, lomas parecido a “el número dos” de Turismo en el Estado, solo abajo del secretario.
La charla como Gallegos fue alentadora para el director regional en Puerto Vallarta. En esos primeros nueve días de marzo, hubo múltiples rumores y todos invariablemente sostenían que Estrada Virgen ya tenía sucesor. Luis Reyes Brambila presumía que el nuevo titular sería el hijo de un periodista amigo suyo.
Los asesores de Aristóteles Sandoval ofrecieron un plan de liquidación a los nuevos funcionarios y a quienes se mantendrían en sus cargos intentaron obligarlos a firmar nuevo contrato.
A punto de concluir la entrevista con Gallegos, éste le dijo “Me permites, me está visitando el diputado de Turismo, Gustavo González Villaseñor”. Gustavo fuer alcalde acá en Puerto Vallarta y no era ningún desconocido para el funcionario estatal. Ni por atención, menos por educación, saludó a Ludwig Estrada y se fue directo al privado.
Gustavo González Villaseñor fue uno de los principales políticos con interés en acomodar a uno de los suyos en la dirección regional de la Setujal. Hasta cierto punto resultaba natural y Ludwig Estrada lo sabía y lo aceptaba.
Después de la charla de Gustavo con Gallegos se dejó sentir la presión. Como a todos Los funcionarios por finiquitar o ratificar en la Setujal, entre ellos a Miguel González, los estaban llevando a la Junta de Conciliación y Arbitraje. Ahí se firmaban nuevos contratos de tres meses y se formalizaban pagos por liquidación.
“Es que te tenemos un expediente” le soltaron a bocajarro cuando se negó firmar nuevo contrato. Ludwig dijo que antes de negociar la firma de un nuevo contrato y la automática liquidación, prefería lo despidieran. En esos primeros días de marzo estaba ya a tres años de cumplir 30 años de servicio público y podía jubilarse.
Un abogado designado para negociar su retiro le dijo que liquidaciones no había y él reviró: “pues no hay renuncia”. La inmediata respuesta fue un “pues te vamos a denunciar”. Supo luego que dicha denuncia obedecía a la supuesta ilegalidad de haber despachado y cobrado sin contrato de los secretarios en turno. Estrada Virgen estaba seguro que una ratificación en el cargo no lo obligaba a firmar nuevo contrato. Bastaba con el oficio del nombramiento. Además, conserva los recibos de nómina.
De regreso, el paisano Ludwig venía un tanto decepcionado. Al final, acordó con Gallegos negociar su liquidación y acá esperaba oficio en mano a quien decidiera recibirle la oficina. El viernes 8, Ludwig recibió la visita de Díaz Borioli pero sin oficio para formalizar la entrega recepción. “El lunes…” le dijo Gallegos que se materializaría la entrega de la oficina. El sábado 9 de marzo, recibió la fatal noticia. En una calle de exclusivo fraccionamiento un grupo de pistoleros ejecutaron a José de Jesús Gallegos Alvarez.
La muerte del Secretario de Turismo fue una regadera de damnificados políticos. El ex alcalde y ex diputado Gustavo González fue uno de ellos. De José Luis Díaz Borioli, ya nada se supo de actividad pública. Si es que existió aquel “hijo de un periodista” tan promovido por reyes Brambila, esté también se esfumó.
La grilla que atrapó a Ludwig Estrada se opacó y el nuevo titular de la Setujal, Enrique Ramos se entendió a la perfección y sin tantos rodeos lo ratificó en el cargo.
A medio sexenio, el aun director regional cumplió sus 30 años de servicio público y se situó en posición de tramitar su jubilación. Miembros del Consejo de Administración le han adelantado que el 5 de diciembre próximo le dan su pensión.
Con su jubilación, el nativo de Estación Yago, Nayarit pone fin a una larga trayectoria en la Secretaría de Turismo a la que le entregó 33 años de su vida productiva. No se le olvida aquella recomendación con la que llegó a Puerto Vallarta. Javier Esparza Montelongo lo llevó con Ramón González Lomelí, quien coincidentemente hoy es director de turismo Municipal. El 1 de junio de 1986 le dieron la plaza de inspector. En 1999 fue nombrado “delegado regional”. Ya con el nombramiento de “director regional” de la Setujal se retira.
Su experiencia y conocimiento en turismo, le permitió sobrevivir a las grillas que también las hay en turismo y logró el reconocimiento de los últimos tres gobernadores, Francisco Ramírez Acuña, Emilio González Márquez y Aristóteles Sandoval, quienes lo ratificaron. También lo ratificaron, desde Horacio González Pardo, el dueño de las zapaterías Gon Pard, todos los titulares de la Setujal, desde Aurelio González Rocha, del clan de los dueño de las zapaterías Canadá, hasta el actual, Enrique Ramos.
Revolcadero
Por cierto, con su refundación del estado el gobernador electo, Enrique Alfaro Ramírez ha propuesto sustanciales cambios en la estructura orgánica y de trabajo en la Secretaría de Turismo. A la ex regidora Susana Rodríguez Mejía le corresponderá aplicarse para darle cubertura a toda la costa jalisciense. Las dos direcciones regionales van a desaparecer para convertirse en una sola, en donde despachará “la güera”, como le llaman sus amigos a Susana Rodríguez. Habrá, sí, mas chamba pero son más facultades y atribuciones en áreas como proyectos e inversiones turísticas. Si la ex regidora de veras quiere trabajar, tendrá mucho campo. La costa, desde Boca de Tomates hasta Cihuatlán, toda la Costa Alegre, Tomatlán y sus playas, también Yelapa, Chimo, será de ella. ****** Por cierto, nuestros amigos choferes de la ruita Ixtapa B soltaron las carcajadas cuando supieron que el gobernador Aristóteles Sandoval vino esta semana y declaró que si no tienen aire acondicionado, no deben de cobrar diez pesos el pasaje. Para los chatarrabuses aplica la tarifa de 7.50 pesos. Ese mismo día, en las narices del gober los choferes mantenían el cobro de la nueva tarifa. Nadie lo respeta. “Ya se va”, dicen los chafiretes. Si hablara en serio pudo sacar sus 7.5, subirse a un camión, pagar los 76.50 y si el chofer lo amenaza con bajarlo, presentarse y bajar él al chofer y ordenar mandar la unidad al corralón.****** A los legisladores morenos se les hizo bola el engrudo y lo que aparentemente fue un madruguete se convirtió en otro escándalo. Resulta que el coordinador de la bancada morena en el Senado, Ricardo Monreal presentó la iniciativa para restarle a los bancos esos abusivos cobros por sus servicios. La intención es extraordinariamente benéfica para el pueblo, particularmente para millones de usuarios de la banca comercial, que por consultas de saldos, por uso de cajeros, por transferencias, pagan miles de millones de pesos. Presentan la iniciativa y los mercados financieros se derrumbaron. Que el propio don Amlo, defensor de las causas populares, intervino, pero ahora para detener la propuesta de los abusivos cobros de os bancos. Declarado anti empresario, Andrés Manuel López Obrador esta vez obró en favor de los banqueros, de los empresarios, y en contra del pueblo, al ordenar detener la iniciativa de ley para al menos disminuir los pagos por comisiones a usuarios. Y el designado secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, también operó para salvaguardar el negocio de los banqueros. Ya le tocaba su reculada a los morenos.