Los dos son militantes de Morena, pero ambos trabajan con los del Partido Verde. A saber, Miguel Calderón está unido a su hermano Juan y le ayuda en todas sus promociones y campañas, incluidas aquellas donde se regala --a los ciudadanos para ganar simpatías-- frijol con gorgojo, huevos y pollos.
Lo mismo sucede con Luis Fuentes, quien es asistente del regidor Francisco Sánchez Gaeta; es decir, presume su membresía con Morena, pero es más verde que un perico.
Así las cosas, tanto Miguel Calderón como Luis Fuentes, se registraron para competir como candidatos a consejeros de Morena, pero cometieron el error de dejarse asesorar por militantes del Partido Verde y por Bruno Blancas y el resultado final fue un estrepitoso y vergonzoso fracaso.
LA VERGÜENZA VERDE
Lo peor de todo, es que pensaron que Bruno Blancas los iba a convertir en consejeros, pues el diputado federal los apantalló al reunirse con la membresía joven del Partido Verde, entre los que estaban Jesica Zatarain, Paquillo Sánchez, Juan Calderón y otros; esto, según ellos, para cerrar filas y tratar de aplastar a los otros candidatos a consejeros como Chuy Michel, Ana Gabriela Rodríguez y Adriana Paola Paniagua.
Y es que los efebos de Bruno Blancas, Luis Fuentes y Miguel Calderón, no alcanzaron ni 50 votos auténticos, pese a que fueron apoyados con todo por los del Partido Verde, cuyos dirigentes ahora demuestran flaqueza, debilidad política y una total ausencia de experiencia en operaciones políticas.
Imagine usted, si en una simple elección de consejeros les dan una paliza a los candidatos que ellos promueven, qué será en el proceso electoral constitucional para elegir al próximo presidente municipal… No lo queremos ni pensar.
El otro perdedor y que se vio muy mal por andar promocionando chapulines y sostener un romance con el Partido Verde, es Bruno Blancas, quien de plano no da una, sigue del lado equivocado y piensa que los Michel son el enemigo a vencer, cuando los adversarios están en otros partidos.
DE IGUANAS… A GARROBOS
Bajo este escenario, también deberíamos preguntarnos qué demonios estaban haciendo en una elección de Morena tanto Paco Sánchez Gaeta como Juan Calderón Ibarría… Pues lo único que lograron fue exhibirse y exhibir a sus achichincles que pretendían ser consejeros del partido de AMLO.
Pero bueno, echando a perder se aprende, aunque creemos que de este golpe no se van a levantar los “morenistas” camaleónicos Miguel Calderón Ibarría ni Luis Fuentes, pues el contundente triunfo de Jesús Michel –fue el morenista más votado de Jalisco, de ese tamaño son los alcances del hijo del profesor—y los sufragios que obtuvieron Ana Gabriela Rodríguez (hija por cierto del regidor más veloz de la pradera, José Rodríguez “El Chato”) y Adriana Paola Paniagua, los deja en una lamentable situación política y no les va a quedar de otra más que quitarse las máscaras, renunciar a Morena y darse de alta en el Partido Verde.
Si ellos se animan, quizás hasta Bruno Blancas los siga y un día de estos se pinte del color de las iguanas… claro, antes de convertirse en garrobos.