Como lo informamos en su oportunidad, Carlos Jesús N fue denunciado en mayo del 2023 –cuando tenía 21 años-- por una de las madres que conocieron de viva voz el relato de su hija, que en ese entonces tenía 12 años, por lo que la Agencia 1 del Ministerio Público adscrita a la Unidad de Investigación para Delitos de Violencia Familiar, Delitos Sexuales y en Agravio de Menores, inició una Carpeta de Investigación (CI) contra el presunto abusador.
Así las cosas, ya habíamos señalado que en la querella –según el testimonio de la madre de una de las niñas afectadas-- se indica claramente que la menor estaba siendo abusada desde que tenía ocho años por su tío Carlos Jesús N, pero que en el 2023 los ataques sexuales se intensificaron; por lo que en ese entonces, el juez de control, Francisco Barrera, giró una orden de aprehensión contra el presunto depredador sexual.
Antes, la madre de otra menor también denunció al mismo sujeto por abuso sexual agravado en perjuicio de una niña de nombre reservado, por lo cual, también se libró orden de aprehensión en contra de Carlos Jesús N.
EL MODUS OPERANDI
De acuerdo con información que ya se ha hecho pública, Carlos Jesús N aprovechaba que su mamá le pedía que ayudara a niños vecinos de la colonia Centro de Puerto Vallarta con sus tareas –como profesor (sin serlo), dizque para regularizarse--, para quedarse solo con ellos y presuntamente cometer los abusos.
Según la versión de algunos padres de familia, Carlos Jesús N habría agredido por lo menos a ocho menores de entre cinco y nueve años, pero hasta ahorita solo dos casos se han dado a conocer, el de su sobrina y el de una amiguita de esta.
Sin embargo, en febrero pasado, la juez María Karina Dolores decidió cancelar las dos órdenes de aprehensión que pesaban contra el sujeto abusador, pese a que éste había estado prófugo y no obstante a que el Ministerio Público presentó 29 datos de pruebas con los que se demostraba la felonía del individuo.
LA APELACIÓN
Ante semejante decisión, los abogados de las familias afectadas interpusieron un recurso de apelación en contra de la resolución de la juez Karina Dolores, quien después de involucrarse en este escándalo de injusticia, fue cambiada a un juzgado de Guadalajara.
La juez Karina ya había citado a una nueva audiencia el martes 11 de febrero para beneficiar al agresor sexual con la suspensión condicional del proceso, pero gracias a la apelación, la junta se canceló hasta nuevo aviso.
A la fecha, el Tribunal de Alzada no ha resuelto el recurso de apelación. Un Tribunal de Distrito tampoco ha contestado el amparo que interpusieron los abogados de las víctimas; en otras palabras, las autoridades judiciales no han visto por el interés superior de las niños, niñas y adolescentes en este caso.
EN LAS MANOS DE DANIEL CANALES
Lo único que se sabe, es que otro juez de control del Distrito VIII con sede en Puerto Vallarta, Luis Daniel Canales González, ya fijó el 28 de mayo para la audiencia inicial de formulación de imputación a las 11:00 horas, respecto a los hechos atribuidos al imputado Carlos Jesús PP, por su probable responsabilidad en la comisión del delito de abuso sexual infantil agravado en perjuicio de un menor de nombre reservado.
El juez ordenó que se cite al imputado por los medios legales del debido proceso y que, en caso de no comparecer, podría librarse orden de comparecencia o de aprehensión en su contra y ser presentado con la ayuda de la fuerza pública.
De acuerdo con abogados, esta vez será difícil que el presunto abusador sexual de menores quede impune, ya que, según ellos, hay elementos de prueba suficientes para que el juez de control lo vincule a proceso.
Independientemente de lo que suceda en términos jurídicos, ha trascendido que Carlos Jesús N no ha podido llevar una vida tranquila desde que fue denunciado por las madres de las niños y niños presuntamente abusados; incluso, no ha podido tener un empleo estable, ya que habría sido despedido de la sala internacional de ventas de uno de los hoteles del grupo Vidanta, por los señalamientos que pesan en su contra.