Y como en el nuevo edificio de la Fiscalía Regional de Justicia todavía no se tienen habilitadas las áreas para detenidos, se pidió a Seguridad Pública que quedará resguardado en los separos municipales mientras sería trasladado al penal de “Puente Grande” a la mañana siguiente, es decir, el viernes temprano.
El personal de la Fuerza Única prestó ayuda a los policías investigadores de la Fiscalía para que cumplieran con su trabajo y que nadie entorpeciera sus actividades, así como para evitar cualquier contingencia, ya que trascendió que este individuo habría recibido amenazas de muerte dentro del reclusorio de Ixtapa.
Carlos Armando Espinoza es el sujeto que presumiblemente fue detenido unos días antes de que se suscitara la balacera de Villas Río el 18 de febrero pasado y es el que probablemente delató dónde se escondía el sicario que fue abatido ese día y que minutos antes mató a un militar, de ahí su temor a que atentaran contra su vida
Nada tiene que ver con los hechos sucedidos a unas cuadras de las oficinas de la PGR en donde fue ejecutada una persona que se hacía pasar como militar.