Un mes y medio antes, se había aprobado la Ley de Ingresos, la tabla de cobros de impuestos, derechos y demás, herramienta donde el mayor elemento a cuestionar radica en los criterios unipersonales que no se erradicaron. El trabajo por hacer estará en manos de los diputados locales y serán ellos los únicos facultados en rascar pesos y centavos. Es pues en Guadalajara donde pudiera ocurrir algunas modificaciones que por lo general suelen ser mínimas.
Pero bueno, ya estamos en el clímax de las posadas y el espíritu navideño se apoderó de los vallartenses. Las grandes noticias, buenas o malas de fin de año, tendrán orígenes que pueden no ser del edificio donde despacha Ramón Guerrero Martínez. Si acaso queda el pendiente de un grupo de empleados municipales que después de la rebelión antifideicomiso de nómina están en capilla y algunos de ellos defienden su derecho a no ser despedidos.
La Ley de Ingresos 2014 parece haber dejado satisfechos a los regidores, los del Movimiento Ciudadano y los de oposición. Los aumentos intactos están en los rubros donde se estableció cero aumentos en pesos con la salvedad de tratarse aumentos en salarios mínimos. Y como en las primeras semanas de cada año se otorga aumento a los salarios mínimos con ello se echa a tierra la afirmación de que no habrá aumentos en los conceptos a cobrar en la Tesorería Municipal. De cualquier forma, no hay desproporción en los mismos como ocurrió el año pasado y eso es algo de ganancia para quienes demandan no a los aumentos. Las licencias, la carnita más jugosa de los ingresos municipales, aumentarán en la proporción de los salarios mínimos.
Ha sido el Presupuesto de Egresos donde más gotas de sudor perdió el alcalde Ramón Guerrero. Sacó la aprobación por mayoría, solo el voto en contra del regidor panista Humberto Muñoz Vargas. El regidor perredista, Miguel Ángel Yerena Ruiz se limitó a dejar la advertencia de la ilegalidad de aprobar tal presupuesto en una sesión extraordinaria lo cual a su juicio, debe discutirse y Aprobarse en una sesión ordinaria. Guerrero Martínez alegó que nada de ilegalidad existe en el carácter de sesión extraordinaria y le dio para adelante al trámite. Fue mínimo el debate en torno a la discrecionalidad del gasto. Este es también un punto en el que jamás habrá unanimidad en razón de que a la hora del gasto mayor, todos los que llevan voz, que no decisión, suelen ponerse de acuerdo.
Como se trata de dinero, nos llamó la atención que nuestros regidores guardaran sus machetes al acudir la noche del sábado a discutir el gasto del dinero. Quizá los integrantes del Ayuntamiento tengan en sus manos el desglose del gasto. Hacia fuera es poca la información que ha fluido y eso suena hasta raro y sospechoso. Solo nos han dicho, que el aumento no rebasa el porcentaje del 7 por ciento, aumento proporcional al gasto del año pasado.
Interesante resulta saber cada año en qué se gastará mil 484 millones de pesos. Antes se supo que el gobierno federal mandará 70 millones a compartir con Bahía de Banderas, la partida que llaman Fondo Metropolitano.
Se discutió en efecto algo que tiene que ver con la partida a etiquetar para los servicios de pago de deuda. Se objetaron los millones para cubrir sobre todo los 450 millones de pesos que desde los tiempos de Javier Bravo se contrajo. La deuda ya se redujo en algo así como 100 millones. A la propuesta inicial se hicieron leves modificaciones en partidas reservadas a pagos servicios de arrendamiento, sentencias y resoluciones judiciales, jubilaciones, donde se advierten problemas inmediatos ante cascadas de sentencias desfavorables.
Pero la información no fluye en áreas de interés general. Es poco, sino es que nada, la información hacia el exterior de los muros municipales. El destartalado y paralizado equipo de comunicación social de la administración perdió una oportunidad más para informar con puntualidad a la comunidad sobre montos a gastar. Por ejemplo, a la comunidad interesa saber partidas para la obra pública, el arreglo de calles, programas sociales, becas, compra de mobiliario, de patrullas, apoyo al campo, dinero para regularizar los pagos con Pensiones del Estado, etc.
Por el monto, tal parece es buen dinero para hacer frente a los vaivenes del 2014 aunque en honor a la verdad, no hay dinero que alcance. Se pretende disponer de unos 15 millones para cumplir con las sentencias o laudos pero los bien enterados estiman que solo por fallos de empleados despedidos, habrá requerimientos para pagar sumas que juntas podrán alcanzar los 100 millones de pesos. Son los pagos que por caprichos y decisiones absurdas de quienes toman las decisiones acaban por desfalcar las arcas municipales. Ahí estaban como crudo ejemplo los trabajadores despedidos a últimas fechas reclamando al alcalde su reinstalación. Todos los últimos alcaldes, coincidentemente priistas, despidieron a decenas de trabajadores sin tener fundamentado el cese.
La nómina y pagos asociados a este tipo de servicios, es la carga más pesada del gasto corriente. El gasto se lleva casi la mitad del presupuesto pero aun así, hay información que se mantiene reservada. Si se sujeta a la partida fija, son 550 millones de pesos, pero cuando se suman otros rubros asociados a gastos por servicios diversos, honorarios profesionales y diversos contratos, el monto se eleva sin aparentes controles. Por ejemplo, el subsidio al DIF, calculado en un medio centenar de millones de pesos, nunca ha sido transparentado. Al no cimentarse diversos gastos con rígidos controles, se abre la pauta a la inexistencia de desgloses cuya consecuencia final es la opacidad en el gasto. Y como los ríos revueltos dejan ganancia a los pescadores, que nuestros dos lectores saquen sus conclusiones finales.
REVOLCADERO
El gobierno del estado ya también tiene su presupuesto 2014. Aristóteles Sandoval Díaz podrá ejercer 83 mil 292 millones. A su propuesta original también se le hicieron observaciones menores, una serie de reasignaciones de 460 millones de pesos. El administrador del rumbero en el Supremo Tribunal de Justicia, Gabriel Salcedo hizo su chamba y logró181 millones de pesa adicionales al presupuesto pretendido desde Casa Jalisco. Ese dinero se destinará al modelo de los juicios orales y en conjunto, al nuevo sistema de justicia que implementará el rumbero Luis Carlos Vega Pámanes, el mero mero del Poder Judicial. El amigo de Pámanes, Jaime Gómez, un lustre vallartense, podrá gastar en el Consejo de la Judicatura 593 millones de pesos. Y los que se encargan de disponer, parafraseando a Vicente Fox, los diputados, se auto agregaron otros 21 millones de pesos extras. Los hospitales civiles administrados por la UdeG, y la institución en su conjunto, también pidieron dinero extra al contemplar en la iniciativa del presupuesto. De algo sirven los diputados que le cuidan las espaldas y los intereses al líder moral de “Grupo Universidad”; Raúl Padilla. Y el chiqueado de Aristóteles, Luis Carlos Nájera dispondrá de 340 millones de pesos para su policía del mando único. ****** Respecto al llamado PEF, Presupuesto de Egresos de la Federación, el paquete también está listo. En relación con el 1013, hay un incremento del 8.8 por ciento en el gasto programado. La estratosférica suma asciende a los 4 billones 461 mil 225.8 millones de pesos. Dice la gente de Enrique Peña Nieto que les interesa el gasto de inversión por encima del gasto corriente y que se aumentó un 14 por ciento el gasto en infraestructura. Al área de desarrollo social se destinará el 58.5 por ciento del PEF. El 32.3 por cierto al desarrollo económico. Si se trata de secretarías, la SEP tendrá un presupuesto de 292 mil 548 millones de pesos. Se nota que a Peña Nieto le gusta el gasto social pues tendrá un Fondo Solidario de casi dos mil millones de pesos, dinero con el que cubrirá el llamado Seguro de Desempleo. El fondo para el Seguro Universal es de 42 mil millones, dinero con el cual se apoya a las personas mayores de los 65 años y se subsidia los programas de Seguro de Vida, Jefas de Familia etc. El espíritu asistencialista, o las políticas paternalistas, se mantiene intacto. En cambio, se redujo el presupuesto a la CNDH, a la SHCP, se pellizcó dinero a los programas de apoyo a ahorradores y deudores de la banca y a las dos cámaras.