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Reconocen el liderazgo de su director, César Abarca Gutiérrez, por emprender obras prioritarias para la mejora integral del sistema colector de aguas residuales

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El Mayor Rogelio Hernández de la Mata, titular de la corporación, compartió con los jóvenes el interés de este gobierno municipal por trabajar fuertemente en el tema de prevención

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Por Jorge Olmos

La debilidad es un impulso intrínseco en todos los seres humanos, algunos las tienen por gustos, otros por aficiones, conductas, artículos, muebles, autos, casas y… también por mujeres y hombres ajenos; es el paso consumado de los pecados capitales y en el caso que nos ocupa, la perdición de aquéllos que entraron al mundo del “tiempo compartido” y de cuyas garras no se libraron jamás.


 

La industria del tiempo compartido en México genera cientos de millones de dólares al sector turístico y son muchas las empresas que están en los primeros lugares del ranking en ventas, como son las de Puerto Vallarta, aunque realmente se pueden contar con los dedos las compañías realmente exitosas, como Mayan Palace, Villas del Palmar, Velas Vallarta, etc.

Sin embargo, pocos pueden imaginarse que el producto del éxito de las firmas hoteleras del tiempo compartido se debe a todo un ejército de vendedores, entre OPCS, linners y closets, que son los que hacen el primer contacto con parejas de turistas nacionales y extranjeros, los promotores, los que convencen y lo que cierran los contratos.

El mundillo de los OPCS no goza de buena reputación, de ellos se dicen muchas cosas, que tras de su aparente éxito se esconden vicios, rivalidades, mentiras, vida loca y muchos, pero muchos escándalos.

Aquí es donde entra precisamente el relato de Androit Ava Martí, un trabajo que desnuda a hombres y mujeres que se dejaron seducir por el poderoso ambiente del llamado “timeshare” y que terminaron en el callejón de los recuerdos tristes, pues la mayoría construyó un destino de naipes que al primer soplo de aire se derrumbó.

Todos y todas cayeron víctimas de sus propios excesos, como la golosa Didí que irrumpe en una sala de juntas para implorar que le hagan el amor. Si el amante en turno no quiere, ruega al amigo del novio para que la complazca.

O el adicto Riva, que cambiaba de humor según las exigencias de polvo blanco en su roja nariz. El necesitaba la droga y el sexo para sentirse pleno y poderoso entre sus jefes y compañeros.

O como Guido Lira, un muchacho surgido de los barrios más pobres y que gracias a las ventas del tiempo compartido llegó a la cima, a la Dirección de una empresa, en donde sólo valían los falsos valores, el lujo, el poder y el dominio sobre los demás

La información de Androit Ava Martí es rica en detalles y nos traslada al momento exacto en que sucedieron las “debilidades” de los protagonistas. Un escrito que seguramente lo absorberá de principio a fin; de palabra en palabra, de párrafo en párrafo y de capítulo en capítulo.

Es una delicia y un alimento para el morbo, por ejemplo, enterarse cómo una exitosa mujer terminó muerta de los celos y del coraje al saber que su esposo se acostaba en plena orgía con el grupo cachondo de la sala de ventas, bautizadas como “el grupo explosivo”.

Annie es otra dama del caliente mundo de las salas de ventas, ella permitía todo con tal de mantener a su lado a su novio Thimmy, hasta ir a un motel para hacer un trío, un cuarteto y hasta un acto lésbico.

De todo hay en las historias de Ava Marti, como en botica, y entre los más perversos está Chelsy, un gigoló perverso que se llevaba a las vendedoras a su recámara para hacerlas gozar y el que gozaba más era su amigo Menny, que se ocultaba en un clóset en común acuerdo con Chelsy para ver cómo éste penetraba a las muchachas que caían, gustosas, en su juego.

Todos los personajes son reales, por sus nombres los conoceréis, y aunque la autora se cuidó en utilizar seudónimos, los que viven en este submundo sabrán quién es quién.

A continuación, reproducimos unos fragmentos con la autorización del autor:

LA PIÑATA                                                  

¡Dale!, ¡dale!, ¡dale!, no pierdas el tino, porque si lo pierdes, pierdes el camino… el camino ya estaba más que perdido y solo se andaba a tientas, no importaba el rumbo y solo importaba tener “eso” que hacía tanta falta y que muchas veces se obtenía con dinero. Y si este no había, pues se pagaba con sexo. Se pagaba a cualquiera, fuese hombre o fuese mujer, el chiste era que trajera marmaja, nieve, colitas verdes y azulitas. El medio para obtener cualquiera de ellas era lo de menos. Como se dice, “el fin justifica los medios”.

Y a estas alturas se dejaba llevar como perrito con correa a donde el amo, don vicio, condujera. Y en cuanto veía el tesoro empezaba a mover la colita cual perrito agradecido.

Ahora estaba en medio de una sala con todos aplaudiendo. Está en medio con un pañuelo en los ojos y un palo en las manos dándole duro a una piñata. El pañuelo mal atado a la cara permitió tener un poco de visión y observar a los presentes que lucían, ávidos, ansiosos y desesperados el momento que tronara esa piñata, pues el contenido era algo más valioso que un caramelo.

Esta no era una piñata cualquiera, su contenido eran paquetitos blancos, verdes y azules. Era todo un festín, y qué decir de las comidas, un gran banquete, pero claro el ansiado postre… ¡sí!... un postre de chocolate ¡brownies!, sí, muchos brownies integrales y hechos de puras semillas especiales, para paladares exigentes, los cuales, a los pocos minutos de consumirlos, se empezaban a sentir los efectos, después todo era bonito, fácil y excitante.

LA FIESTA

Era por todos sabido que a  estas fiestas… taaan especiales… de Roy Kali, no cualquiera entraba. Yo fui con una invitación especial por Lory  Zalow y lo hice por atención, pues ella me apoyó cuando ingresé a este club vacacional. Independiente a los vicios, era una chica muy agradable  y era de la confianza de Roy.                                                       

Mi presencia en la fiesta fue un gran error, pues no podía ocultar mi sorpresa por todo lo que veía y con mucho cuidado me cuidé de lo que comía  y bebía.  Fue una sorpresa que provocó risa a Lori cuando se quebró la piñata y un paquetito blanco cayó en mi pecho…

--Pelee tremendos ojos como si fuese un bicho, pero  Lori metió mano y lo tomó cual valioso caramelo—

Después comprendí por qué Roy Kali me miró con desapruebo en el momento que Lori y yo entramos al lugar. Y cómo  demostró alegría cuando me retiré, pues lo que siguió después fue como en Las Vegas…   “en Las Vegas se quedó”.

Bastó ver a Lori al día siguiente con una cara de entre desvelo y satisfacción que no podía ocultar. Y menos con los moretones en el cuello y en el escote de su blusa  y los cuales procuró cubrir con una mascada.

THIMMY Y ANNIE

 

Hábilmente Annie le sacó un compromiso para casarse y aunque Thimmy no quiso ni traer su acta de nacimiento, solo Annie sabe cómo le hizo para casarse solo a la iglesia y se dice que más adelante se casaron en un viaje relámpago. 

 

Cada día que pasaba Thimmy descuidaba sexualmente a Annie. Ella se quejaba con sus compañeras y una ocasión comento un penoso incidente. 

 

Ambos se fueron a la cama, Annie trató de intimar pero Thimmy le dio la espalda fingiendo dormir. No le quedó más que tratar de dormir y cuando apenas empezaba a conciliar el sueño y se quedó quieta, Thimmy pensó que estaba dormida y él se levantó y se dirigió a la sala. Annie esperó un momento considerable a que regresara, pero no lo hizo, por lo que decidió ir a ver y grande fue su sorpresa: ¡Thimmy estaba frente al televisor viendo pornografía a la vez que se masturbaba! Annie explotó gritando y reclamándole cómo era posible que prefiriera sexo solitario teniéndola a ella a un lado.

 

Cínicamente Thimmy aceptó que el disfrutaba hacerlo y que cuando no podía dormir eso lo relajaba bastante. Él se puso de pie y se dirigió hacia ella abrazándola y diciéndole tiernamente.

 

  • Hooney, no lo tomes a mal, claro que tú me encantas, contigo tengo  mucho placer,  esto solo es raro—

     

    Claro que era raro  y  Annie estaba loca por él y aceptó la excusa de Thimmy. El amor la cegaba, pero Ada ya había comentado que en un show travesti Thimmy aplaudía a “las chicas” con mucho placer.

     

  • Este cuate es gay. Y mira si se los digo yo—

     

    A voces se creía que Ada era lesbiana y entre gays se sabían detectar fácilmente.

     

    Pero no hay más ciego que el que no quiere ver.

     

    --En su afán de salvar su matrimonio Annie aceptó lo que Thimmy  le pedía. Una sola sugerencia era como una orden para Annie, la cual se desvivía en complacer.

     

    Otro gusto fue el de probar estimuladores como éxtasis y todo esto la arrastró hasta complacerlo en lo más bajo.

     

    Un día llegó muy alterada, y llorando confesó algo para nosotros muy inusual. Thimmy la invitó a pasar una noche muy especial y única, que la  había planeado con todo el afán de darle placer y novedad a su relación. Annie aceptó gustosamente.

     

    La llevó a un motel y pidió una habitación con jacuzzi. Ordenó bebidas y pidió que enviaran la sorpresa. ¡Sorpresa la que se llevó Annie! pues llegaron un atractivo hombre y una bonita mujer, vestidos con ropa de piel negra y muy sensual. Ante la cara de Annie, Thimmy la abrazó por la espalda besándole el cuello y acariciándole los senos, a la vez que la decía al oído.

     

  • Relájate Darling, te garantizo que lo vas a disfrutar, solo déjate llevar--

     

    La mujer se dirigió a Annie, la tomó de la mano y la llevó al centro de la habitación, le tomó el cabello y empezó a jugar con él y poco a poco empezó a tocarle los hombros, rozándole con las yemas de los dedos. Annie seguía sin moverse, pero no la rechazó, lo cual la mujer lo tomó como permiso y continuó con su juego de caricias, hizo a un lado los tirantes del vestido miniatura de Annie, dejando que este callera al suelo para dejarla en puras tangas, ya que no traía brassier. La mujer con un descaro se inclinó para besarle los senos y a lamerle los pezones que de inmediato se endurecieron provocándole una sensación en la entrepierna. Thimmy observaba desde un sillón con una bebida en la mano. Daba sorbos lentos a la vez que se mordía el labio inferior. Thimmy  se acariciaba el pene por encima del pantalón y lanzaba una mirada al hombre que permanecía parado a un lado de él… (Continuará)

 




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“Yo soy Trabajadora Social del Hospital desde hace cinco años y aún me duele ver a la gente de escasos recursos llorar y morir de angustia por no tener para comprar los medicamentos. Me duele ver a la gente retorcerse porque no tienen para pagar un estudio; es desgastante ver que el Hospital puede hacer más con lo que tiene y no lo hace, es muy tensionado trabajar bajo la presión de la mentira, porque sabemos que sí hay recursos”

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Por las Chicas Súperpoderosas

Ahora sí, agárrense estimados lectores, porque las chicas que hacemos posible esta columneja hemos cogido el tercer aire (y no es albur) y ya estamos de regreso con lo más candente y nuevo de los chismes que abarrotan los cafés, cantinas, antros, tugurios, burdeles, oficinas públicas, radios pasillos y demás, que traen vueltos locos a sus protagonistas y que, desde luego, ya son clientes de la Unidad de Inteligencia y Contraespionaje de las Chicas súper ponedoras, perdón, poderosas.


 

LE EXPLOTÓ EL BOILER

La que ya necesita ir a Chalma, Veracruz, a que le hagan una limpia, o ya de perdida al mercado de Sonora de la Ciudad de México (o a Taiwán de Dios, pal caso es lo mismo) es a la regidora Doris Ponce Aguilar (mejor conocida en el bajo mundo como Lady Daga), pues cuando el alcalde más necesitaba de ella, ¡pum! Que le explota el boiler en plena máscara, es decir, en el mero rostro, cuyo cutis que ha cuidado con esmero y con tesón endiablado, sufrió severas quemaduras el pasado jueves 20 de marzo, por lo que tuvo que ser trasladada para su cuidado y atención al Hospital Regional.

Nada de llevarla al Hospital Regional para hacer fila durmiendo en el suelo o a los pésimos servicios médicos municipales, ¡No! ¡Qué va!, fue llevada al mejor nosocomio de la ciudad, pues la chica vale lo que pesa en oro, aunque muchos dicen que el cobre es su metal preferido y que gusta mostrarlo todos los días de la semana.

A Doris la necesitaban para que se sumara a los votos del presidente municipal, que había convocado a sesión de Cabildo para el viernes 21 de marzo, pero con el accidente de “Lady Daga”, tuvieron que suspender la junta del pleno hasta nuevo aviso.

Ya en serio, estas chicas hacen votos porque pronto se restablezca nuestra querida Doris. De hecho estamos tristes, porque si se nos enferma entonces quién va a ser nuestra clienta número uno. Por eso les rogamos a los doctores que hagan su mejor chamba para que no quede quemada. Por la cuenta no se preocupen, que al fin y al cabo el pueblo paga, el pueblo aguanta. Si aguantaron las operaciones de chichis de algunas viejas durante la administración de Gustavo y Javier Bravo, que no aguanten una simple restirada de cara de nuestra queridísima Doris.

LA RUPTURA DEL AÑO

Pero dejemos a Doris a un lado, el chisme de chismes es la ruptura del Mochilas con la flamante primera dama de Vallarta, Magaly Fregoso, pues el alcalde ya no aguantó más a la “cara de caballo” (así le dice él) y la envió a la nave del olvido, rompió con ella y para luego se consiguió otra chavita, esta sí bonita, aunque algo silvestrita, oriunda de Las Palmas de nombre Ada; que de ser una simple secretaria de la oficina presidencial, ahora es la mujer más poderosa del Ayuntamiento vallartense.

PA’ TODO EL AÑO

Dicen que Magaly pataleó, chilló y casi se cuelga del coraje –y no porque realmente esté enamorada del presidente—sino porque al no contar con el manto protector de Ramón Guerrero, su poder disminuyó, tocó fondo y de puro despecho se fue con unas amigas y su inseparable amor platónico, Héctor Briseño, a la inauguración del nuevo antro de Los Altamirano, “La Santa”, donde se puso una guarapera de aquellas que sólo se pone Luis Munguía y antes Pepe Muelas. Los que estaban cerca comentan que a cada rato entonaba la canción esa de José Alfredo Jiménez que dice más o menos así:

“Por tu amor que tanto quiero, y tanto extraño, que me sirvan una copa y muchas más, que me sirvan de una vez pa’ todo el año, que me pienso seriamente emborrachar; si te cuentan que me vieron muy borracho, orgullosamente diles que es por ti, porque yo tendré el valor de no negarlo, gritaré que por tu amor me estoy matando, y sabrán que por tus besos me perdí (¡ajúa!)… Para de hoy en adelante ya tu amor no me interesa, cantaré por todo el mundo, mi dolor y mi tristeza, porque sé que de este golpe ya no voy a levantarme y aunque yo no lo quisiera, voy a morirme de amor (¡ajúa! y recontra ¡ajúa!)

LE SOLTÓ LA RIENDA

Pero qué creen, al segundo día de inauguración de “La Santa”, un sábado, que llega el alcalde con la súper secretaria Ada y no pasaron muchos minutos cuando los chismosos del lugar vieron cómo Ramón Guerrero besaba a la nueva novia. Y no crea usted que besos tímidos o de púberes, ¡no!, eran besos franceses, casi, casi como los que nos chutamos en la década de los noventa en la película “Nueve semanas y Media”.

Como que en ese momento a todos les venía a la mente otra canción de José Alfredo, esa que dice: “Se me acabó la fuerza de mi mano izquierda, voy a dejarte el mundo para ti solita, como al caballo blanco le solté la rienda, a ti también te suelto y te me vas a ahorita... Y cuando al fin comprendas que el amor bonito lo tenías conmigo, vas a extrañas mis besos en los propios brazos del que esté contigo” (Héctor Briseño sólo tragaría saliva en un escenario así)…

Pero la canción dice algo que Magaly en su soberbia no aprendió: “Cuando se quiere a fuerza rebasar la meta, y se abandona todo lo que se ha tenido, como tu traes el alma con la rienda suelta, ya crees que el mundo es tuyo y hasta me das tu olvido”.

DE PARRANDA EN PARRANDA

Desde ese día, efectivamente, Magaly Fregoso le ha dado rienda suelta a su vida y una semana después se fue a encerrar en una residencia de Nuevo Vallarta, propiedad de Diego Álvarez (aquél muchacho hijo de una regidora de Bahía de Banderas que fue novio fugaz de Doris Ponce), donde se puso otra borrachera de Padre y Señor Nuestro y donde no dejaba de lamentarse la enorme pérdida que significa para ella la separación con Ramón Guerrero.

Ella que soñaba con ser presidenta municipal de Puerto Vallarta; ella que está dando lo mejor de su juventud al Movimiento Ciudadano; ella, la diva de divas; ella la mandamás del DIF, ser tratada de esa manera… ¡no!, ¡qué horror!... Pero dicen que puede más el dinero que el orgullo, y que no renuncia al DIF porque de plano se quedaría en la calle y de paso dejaría en la orfandad a sus incondicionales, como Halina, su asistente personal.

La ruptura entre Ramón y Magaly tiene muchas aristas, pero el verdadero fondo sólo ellos lo saben. Las lenguas de doble filo comentan que el alcalde se cansó de los excesos de ella y que una de las gotas que derramó el vaso fue el descuido de las guarderías del DIF, donde reconoció la propia Magaly que le daban de comer comida de mala calidad a los niños, pero que “sólo fue durante una semana”.

EL CLUB DE LA TORTUGA NINJA

Pero bueno, la Unidad de Inteligencia y Contraespionaje de estas Chicas hurgaron aquí y allá, escarbaron, buscaron, preguntaron y de pronto ¡Bingo!, encontramos una fisura en la pared, una grieta de la vida loca de Magaly Fregoso que pudo haber hartado al presidente, ya que se integró a un círculo de amigas que se caracterizan por la parranda permanente, el fashion, andar de antro y sacarle jugo a todo el poder e influencias que le da a Magaly ser la primera dama.

Son mujeres, chicas, medianas y algunas ya lagartonas, que son muy “open mind” hasta en su vida de pareja, lo mismo salen con una muchachita que con un jovencito o todos y todas en bola.

En el primer cuadro aparece constantemente Halina Rodríguez Macedo, que en su Facebook se hace llamar “Halalii Bee Rguez Macedo”, una chica de origen muy humilde de Mismaloya que trabajó como empleada doméstica (de sirvienta pa’ que mejor nos entiendan) de una señora que se llama Adriana Sánchez Zapién que vive en la mejor zona de Lomas de Mismaloya.

Pues bien, esta chica por circunstancias de la vida conoció a Magaly Fregoso y de pronto apareció como “diseñadora” del DIF (así cobra en la nómina), pero funge como asistente de la primera dama, lo suficiente como para que Adriana Sánchez la aceptara en su círculo social, ya no le diera trato de mucama y se la llevara a todos lados y a todas las fiestas a donde también asiste Magaly.

Y ya sabrán, con la mente bien “open mind” de doña Adriana Sánchez, los rumores entre sus amistades no se han hecho esperar, al grado de especularse que las simpatías entre ellas van más allá de simples intimidades.

Incluso, Halina tiene cientos de fotos de sus fiestas donde aparece con Adriana Sánchez y Magaly Fregoso, además de los viajes a lugares que nunca soñó siendo empleada doméstica, como Las Vegas y Venezuela.

Desde luego, Magaly, --que lavaba autos por la calle Viena-- y Halina, nunca se imaginaron entrar a la socialité de Vallarta, que es donde pulula esta dama que tiene algo que ver con la empresa “Fincasol” y que ha tenido todo tipo de amistades en el pasado reciente.

La señora también es la “benefactora” del DIF, pues rifa joyas Tiffany, pero piratas.

LA DAMA DE COMPAÑÍA

Pero miren ustedes, las cosas no son como parecen, todo depende del color del cristal con que se miren. Por ejemplo, en las oficinas del Registro Civil el escándalo ya es un secreto a voces, debido a que el Oficial Mayor, Nicolás Urrutia, trae de dama de compañía ni más ni menos que a una secretaria que es casada de nombre Lupita (nos reservamos el apellido por respeto al marido). Se la lleva a todas las “convenciones” que tiene en Guadalajara y la Ciudad de México (eso dice él para sacarla de Vallarta) y lo peor de todo es que ya se dio cuenta la esposa de Nicolás, una reconocida abogada de la ciudad.

Pero no solo la abogada, también ya saben del “affaire” de estos dos el mismísimo esposo de Lupita.

Ver para creer… y aún hay más, dijera Raúl Velasco.

LA DESNUDEZ DE LA REINA

Y para terminar, les vamos a contar la nota de ocho: Resulta y resalta que algún despechado subió al Facebook de la delegación de El Pitillal fotos totalmente desnuda de la ex Reina de las Fiestas Patrias de esa demarcación, Yadira Nathalí Jiménez Aceves.

Que el delegado Guillermo Villaseñor, de oficio taquero,  andaba como cucaracha en quemazón para que quitaran semejante cachondez antes de que los acusaran de pornografía… y en pocos minutos ¡zaz!, que quitan lo que otros veían con morbo y con asombro.

¡Si alguien conoce al susodicho autor de semejante atentado cibernético, que se reporte con estas Chicas para ponerlo en su lugar!




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El hoy indiciado JUAN FERNANDO HUERTA PARTIDA, de 44 años de edad, se desempeñaba como maestro de Educación Especial en una escuela de esta Ciudad portuaria, en la cual tenía a su cargo la educación de menores de edad con necesidades especiales, entre ellos la menor ofendida (de 13 años de edad), quien no puede expresarse verbalmente, ni tiene un método de lenguaje alterno, necesita de ayuda para desplazarse de un lado a otro.

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Por Gabriel Ibarra Bourjac

SOBRE LA MUERTE DE COLOSIO SE HA HABLADO MUCHO DE LAS VIUDAS, QUE FORMARÍAN EL NUEVO GRUPO DE PODER. NO SUCEDIÓ. PERO HUBO TAMBIÉN VÍCTIMAS. Y PARADÓJICO QUE ENTRE ÉSTAS HAY DOS PERSONAJES QUE COLOSIO LOS ODIÓ ANTES DE MORIR: CARLOS SALINAS DE GORTARI Y MANUEL CAMACHO.

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María Eugenia Barrera Segura y Gregorio Martínez Gómez, a golpes, dieron muerte a Miguel Ángel Toledo Mejía, en abril de 2005 y luego se dieron a la fuga.

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“Inició la autocrítica partidista y se apropió de la exigencia ciudadana de más democracia, y del clamor popular de mayor justicia social”, aseguró el diputado federal vallartense.

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Ayer lunes a las 18 Horas, un pequeño grupo acompañamos a Fabricio Ortiz y su familia a esparcir las cenizas de su madre Mariquita Sandoval, en la Boca del hermoso Río Cuale.

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